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"Ciudades: Territorios de convivencia", es el lema del Congreso Internacional de Ciudades Educadoras, que anoche fue inaugurado por el gobernador Miguel Lifschitz y la intendenta Mónica Fein (foto). El encuentro reúne a alcaldes, funcionarios y unos 300 invitados especiales de distintos países. A la vez, unos 1.100 rosarinos se inscribieron para intervenir en diversas actividades. Rosario, que integra la Red de Ciudades Educadores desde hace 20 años, ostenta la vicepresidencia a nivel nacional del organismo. El mandatario provincial rescató que la ciudad integra desde hace dos décadas el "puñado" de localidades que "iluminaron el crecimiento del desarrollo urbano en todo el planeta".

La Franja Joven del río Paraná, el CEC-Galpón 11 y 13, fue el escenario elegido para llevar a cabo la ceremonia de apertura del XIV Congreso Internacional de Ciudades Educadoras. La apertura tuvo la participación especial del filósofo y sociólogo francés Gilles Lipovetsky. Antes de los discursos, se presentó un espectáculo artístico, que caminó entre un homenaje a los inmigrantes y al tango. "Bienvenidos a mi ciudad", brindó una nena de unos seis años para cerrar la puesta. Hasta el sábado se realizarán diversas actividades en la ciudad. "Estaremos en dos distritos de la ciudad, mostrando la diversidad de nuestro territorio, vamos a recorrer experiencias de integración social, de desafíos que la ciudad está trabajando, después haremos lo clásico, almorzar con los intendentes en la Sala Lavardén, recorrer el Tríptico de la Infancia", precisó Fein.

El evento cuenta con la organización de la Asociación Internacional de Ciudades Educadoras (Aice). El congreso se realiza cada dos años y congrega a intendentes, alcaldes, concejales, técnicos de ayuntamiento, representantes de organizaciones de la sociedad civil, estudiantes y ciudadanía en general. En 2018, Rosario le pasará la posta a una ciudad portuguesa. Además del eje central, se abordarán otros tres tópicos a lo largo de las jornadas: los desafíos de construir las ciudades, la igualdad en las ciudades y el desafío de habitarlas.

La intendenta dijo que el lema del congreso es "algo que nos preocupa tanto a los rosarinos". Fein habló de "respetarnos" y "aprender a vivir con otros". Remarcó que la presencia del Estado en el territorio "sigue siendo el mayor desafío", el "vivir con otros, con diferentes miradas y desigualdades". Por eso, apeló a los "actores de la sociedad civil para impulsar grandes cambios". Defendió a los gobiernos locales, porque lideran un proceso de transformación "como nunca", en el cual es necesario "construir con cada ciudadano y ciudadana un futuro mejor".

Lifschitz felicitó a su "amiga" Fein por la organización de este "gran congreso" y destacó que Rosario se sumó "desde el principio" a la propuesta de la red. El gobernador pidió, pese a que "entra en contradicción con la realidad del mundo", sostener "siempre" un proyecto "de trabajo colectivo, igualdad, democracia, derechos humanos". Con respecto al eje del congreso, afirmó que tiene "enorme vigencia" y admitió que la Rosario de dos décadas atrás "no era tan compleja", ya que no había "tanta diversidad de problemáticas, exclusión y conflictos". Llamó a los gobiernos locales, entre los cuales emparentó a Rosario con la esfera provincial, a trazar planificaciones estratégicas "a corto plazo" por sobre las proyecciones a "20, 30 años" ya que es "demasiado". En ese sentido, Lifschitz que la sociedad actual es "más exigente y menos paciente" y reclama "respuestas más rápidas".

La secretaria general de Aice, Marina Canals Ramoneda, celebró que desde hace "un año" se trabaja con el deseo de que "lo que acá iba a pasar valía la pena". Afirmó que está al tanto que Rosario "lleva trabajando mucho tiempo" el concepto de convivencia con el fin de garantizar, entre otras cosas, el "acceso equitativo a los servicios básicos". Llamó a "reconstruir el espacio publico" y evitar la "deshumanización de las ciudades".

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