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Domingo, 29 de junio de 2008
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Y todo hay que agradecérselo a la "Pecosa"

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Así se ve la "Pecosa", una simple planta de jardín que cambió todo.

Otro de los mitos y, según se sabe un elemento imprescindible para entender el fenómeno de la "sojización" es su aspecto transgénico. Y la sola mención de la palabra hace que enseguida aparezca la multinacional Monsanto (queriendo cobrar los derechos por la autoría de la manipulación genética); los grupos ecologistas advirtiendo sobre los problemas que podría acarrear esta semilla manipulada por el hombre y también la tecnología de una leguminosa que a partir de esta incorporación artificial de atributos se ha hecho tan fuerte como nunca, tanto como para resistir al poderoso glifosato que mata toda maleza pero fortalece a la soja dejándola así sin competidores por el aire, el suelo y el sol.

-¿Qué pasa con la soja transgénica? En Europa se siembra un 70% de estas características y un 30% de soja natural. ¿Cómo es la relación en nuestro país?- preguntó Rosario/12 al Ingeniero Agrónomo Gerardo Severín.

-En Europa era más o manos así, pero ahora se van igualando con nosotros que estamos -yo diría- en un 99% de soja transgénica. Brasil incluso aumentó muchísimo la cantidad de soja transgénica. Pero en Argentina fuimos los primeros en adaptarla rápidamente, pero muchos países ya han incrementado notablemente la superficie.

-Si se puede explicar de una forma más o menos gráfica, ¿qué es exactamente la soja transgénica?

-Sí, se puede explicar y es bastante simple. Se descubrió que en una plantita de jardín llamada vulgarmente "Pecosa", se aplicaba glifosato y esa planta no se moría. Porque tiene un gen que es resistente al glifosato, entonces se le sacó ese gen a la plantita y se lo pusieron a la soja. Eso es lo que se hizo y por eso ahora la soja es resistente al glifosato. Durante los primeros años de investigación había que esperar mucho tiempo para demostrar si la soja era o no resistente al herbicida, entonces la soja ya probada eran semillas más viejas por el tiempo que había que esperar. Después la tecnología ya posibilitó que en un año se compruebe si la implantación del gen había sido exitosa.

Severín rebela que incluso ya existe una alfalfa resistente al glifosato y no la traen al país porque la alfalfa se puede reproducir como la soja casi en cualquier lugar. "En Estados Unidos ya está, pero acá no la quieren traer porque si no la reproduciríamos rápidamente. En cambio, por ejemplo, la tecnología del maíz no le permite al productor decir `bueno, yo me guardo la semilla de un año para el otro y tengo stock de lo que antes le compraba al semillero'. Pero en soja hay muchos productores que se guardan la semilla y después tienen para otra implantación".

Para Severín hay otro aspecto importante en el tema que tiene que ver con la sustentabilidad del monocultivo de soja. "En ese sentido está demostrado que es malo para el suelo, deficiente en cuando al nivel de materia orgánica que consume de los suelos", dice. Pero agrega que la soja en un sistema de rotación racional, hecho con trigo y maiz, en ese esquema de rotaciones se convierte en positivo. "El trigo aporta una gran cantidad de materia orgánica, tiene mucha paja, rastrojo, raíces. Y en este esquema rotar la soja que es una leguminosa con gramíneas como el maíz o sorgo, termina dando un ciclo positivo para los suelos".

Además de ingeniero agrónomo, Serverín es también productor tambero de la zona de Rafaela y sabe del negocio por experiencia propia. Dice que "a a 80 centavos el litro como esta ahora, el negocio del tambo no cierra, cuando los países vecinos lo tienen a 1,50 evidentemente no cierra. Entonces un productor tambero qué hace hoy, aprieta un poco las vacas y siembra unas hectáreas de soja. Algunos dan de baja el tambo y se dedican de lleno a la soja, pero muchos no -y lo digo por experiencia personal- achicamos el tambo y seguimos. Pero aquí hay otro aspecto en la discusión con el gobierno que no es tenido en cuenta a la hora de los reintegros: Si yo tengo 200 hectáreas y hago 50 de soja y resto las dejo para tambo; no soy considerado un pequeño productor sojero y no puedo acceder al reintegro porque mi principal actividad es el tambo. Bueno, estas son cosas que habría que revisar porque en realidad el tambo se achica por necesidad".

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