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Puentes del Litoral S.A., la empresa que construyó el enlace vial Rosario-Victoria, presentó en 1999 un estudio de impacto ambiental para establecer las posibles consecuencias de una obra de gran magnitud, tanto en los aspectos vinculados a los ecosistemas del Alto Delta del Paraná cruzados por el terraplén de 60 kilómetros, como en las poblaciones cercanas al enlace. A casi diez años de dicho estudio, repasar su contenido es una forma de ver qué presagios se cumplieron y cuáles pronósticos aun aguardan nuevos estudios de control, especialmente en lo que hace a la situación de las áreas naturales de las islas.

"La ciudad de Victoria será aquella donde se producirán los cambios urbanos más significativos", indicaba el estudio realizado por la consultora Serman & Asociados S.A., alertando que "el proceso de ocupación ilegal del área de islas puede eventualmente acelerarse durante la operación de la conexión debido a la atracción que significará la oportunidad de realizar actividades comerciales de tipo informal y el fácil acceso a tierras de gran accesibilidad". En otras palabras, esgrimía el fantasma del surgimiento de asentamientos irregulares en Victoria, algo que no se concretó porque -acota Gracia Jarovlasky- "esa posibilidad la brindan principalmente las grandes urbes donde los sectores más desplazados sobreviven de lo que le sobra a los sectores más altos en la escala social".

El informe agregaba que "las dos áreas alrededor de las cabeceras (del enlace vial) concentrarán los conflictos y serán aquellas áreas de mayor riesgo". Lo cierto es que desde la inauguración del puente, poco ha cambiado en las cabeceras y menos aun con efectos negativos.

Por otro lado, indicaba que "el posible aumento de los niveles y la diversidad de actividades, como también el proceso de urbanización provocaría un aumento de la demanda de infraestructura y servicios, lo que deberá planificarse con suficiente precisión y antelación". Según el intendente César Garcilazo, "el tema lo estamos manejando, al punto de que tendimos la red cloacal en más de 400 cuadras, llegando a una cobertura de casi el 100 por ciento, mejoramos el servicio de agua potable y estamos asfaltando más de 400 cuadras".

EL IMPACTO AMBIENTAL DE UNA OBRA DE MAGNITUD

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