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Desde Santa Fe

Otra ex trabajadora de Nuevo Diario, Josefina "Bochi" Clapés, también se tuvo que ir de Santa Fe después del asesinato de Marta Zamaro y Nilsa Urquía, en 1974. "Con la muerte de Marta y Nilsa llegó el horror", escribió en un homenaje a abogados y estudiantes muertos, desaparecidos y perseguidos de la Facultad de Derecho de la UNL, en agosto de 2006, (estanpresentes.com.ar). Bochi ponderó a su compañera de trabajo. "Marta era un torbellino. Cuando entraba a Nuevo Diario, donde era delegada gremial, se movían las paredes, hablaba en las asambleas, defendía los derechos de los trabajadores gráficos. Fue una de las últimas abogadas defensoras de presos políticos que quedaban en Santa Fe. Recuerdo el caso de Erbetta que había sido torturado ferozmente como después hicieron con el intendente (Adán Noe) Campagnolo (en 1976)".

"En esa época, compartíamos los turnos de la noche. Teníamos que escribir en el diario todo lo que pasaba con la Triple A cuando aparecía en todas las ciudades del país ese terrorismo de estado, que luego llegaría a Santa Fe, precisamente, con el crimen de ellas".

"Marta sabía el riesgo que corría", recordó Clapés. "Tres días antes de que la secuestraran me dice que Nilsa, que vivía con ella, se iba a ir (de la Argentina)" y por lo tanto "ella vendría a vivir a mi casa. Un día antes de venir a vivir conmigo, las secuestraron", agregó.

"En realidad, luego nos enteramos que ambas tenían previsto dejar el país y viajar con urgencia a México". Otro abogado defensor de presos políticos, (Rafael) ""el Negro" Pérez ya se había ido. Era claro que los tres abogados estaban amenazados de muerte. Ya habían tramitado los pasaportes, pero llegaron dos o tres semanas después de los asesinatos. Los habían solicitado a través de una agencia de turismo en pleno centro de la ciudad".

"Marta era muy buena compañera, muy buena amiga, muy graciosa, tenía un humor muy ácido. Cuando ella es secuestrada, (el secretario general del Sindicato de Artes Gráficas, Emilio) "el Gringo" Yacunissi moviliza, a nuestro pedido, el gremio en su búsqueda. El día que aparecen los cuerpos de las chicas teníamos una entrevista con Ricardo Centurión, que era secretario general de la CGT. Queríamos movilizar a todos los gremios de la ciudad e incluso ir a un paro por el secuestro de un delegada gremial".

Otra historia sobre el compromiso militante.

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