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Al hablar en el acto que recuerda a las víctimas del atentado, el ministro de Justicia, Aníbal Fernández, reiteró la postura del gobierno argentino en torno a que se trató de un ataque "contra la República Argentina" y consideró que "los autores intelectuales y la conexión local ya deberían estar identificados".
"Se cumplen 16 años de vergüenza nacional", afirmó Fernández, quien sostuvo que el gobierno nacional está "comprometido incondicionalmente" con la investigación por el atentado contra la Embajada de Israel, a la que calificó de "empastada y defectuosa".
La conmemoración se realizó a partir de las 14.45 en la plaza Estado de Israel, en Arroyo al 900 de esta capital, donde funcionó la sede diplomática extranjera hasta su destrucción por el atentado en el que murieron 29 personas, del que se cumplen 16 años.
El acto se inició a las 14,49 con el sonido agudo de las sirenas que recordaron a las víctimas del ataque, tras lo cual se realizó un minuto de silencio en homenaje a los 29 muertos y cientos de heridos que dejó el atentado contra la sede diplomática ubicada en pleno barrio de Recoleta.
Luego, se mencionó a cada una de las víctimas y se colocaron cinco ofrendas florales: una en representación del gobierno nacional, del gobierno porteño, de la comunidad judía, familiares, y la última por parte de la Asociación Judía para Israel.
El primero en hablar fue Carlos Susevich, padre de una de las víctimas, quien consideró que la causa "ya tendría que haber sido resuelta con los culpables y los encubridores en la cárcel" y pidió a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner ayude a "romper el muro de silencio" en torno a la causa "para llegar a la verdad".
Por su parte, y en un breve discurso, el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, quien recibió algunos silbidos antes de hablar, consideró que se trató de "una agresión contra todos los porteños y los argentinos", a la vez que convocó "a buscar y encontrar la verdad juntos".
Asimismo, el ministro de Seguridad Interior israelí, Avi Dicter, que llegó ayer a la Argentina para participar en el acto, renovó las acusaciones de su país contra el gobierno de Irán y destacó que la justicia argentina "hizo una relación inteligente, valiente y exacta entre el atentado e Irán".
En su discurso, Dicter llamó además "a las naciones cuerdas a poner un contrapeso" en torno a la responsabilidad de Irán en el atentado, al sostener que las respuestas en torno al ataque deben encontrarse "en un Estado dirigido por miles de desquiciados: Irán".
Tras los discursos, el grupo de danzas del Club Náutico Hacoaj, Guilboa, bailó una coreografía con la canción "La Memoria" del cantautor León Gieco.
Entre los presentes estuvieron además el vicepresidente de la Nación, Julio Cobos; el embajador de Israel en Argentina, Rafael Eldad; el embajador de Estados Unidos en Argentina, Earl Anthony Wayne; la titular del Inadi, María José Lubertino; la vicejefa de gobierno porteño, Gabriela Michetti y el ex jefe de gobierno porteño, Aníbal Ibarra, entre otros.
También, se hicieron presentes en el lugar los presidentes de las sede de las AMIA y DAIA de todo el país, así como legisladores nacionales y de la ciudad.
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