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Mario Cossío, el prefecto (gobernador) del departamento (provincia) de Tarija, donde está el grueso de las enormes reservas de gas de Bolivia, amenazó en el cierre de la campaña por el "Sí" al estatuto autonómico con "retener" los recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) y las regalías.
"Las regalías y el IDH hacen parte del patrimonio de nuestro departamento y en el instante que votemos por el Sí de la autonomía, nadie se atreverá a tocar un sólo centavo", advirtió, citado por el diario cochabambino Los Tiempos.
Sin embargo, en el mismo acto realizado el jueves último el gobernador se comprometió a "seguir entregando el 85 por ciento de su riqueza al país; sólo queremos que se respete lo que siempre tuvo este departamento".
El prefecto fue cuestionado en la semana final de la campaña por dirigentes del distrito de Gran Chaco, parte de Tarija, porque no reconoció a las autoridades elegidas en la región de Yacuiba con el mismo criterio de autonomía que esgrime su administración frente al gobierno de La Paz, al que acusó de promover la
"violencia y la confrontación".
Cossío, un dirigente del derechista Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), partido que integró los gobiernos de Bolivia de los últimos 50 años, tanto en dictadura como en democracia desde 1982, afirmó también que en 183 años de vida republicana "lo único que trajo el centralismo para el departamento
de Tarija fue la pobreza, el olvido y la postergación".
"Tarija fue generosa en la entrega de recursos para el desarrollo del país, pero después de tanto tiempo no conoció la reciprocidad; su historia fue de lucha para que sea reconocida por los gobiernos del centralismo", dijo, citado por la Agencia Boliviana de Información (ABI).
Los movimientos sociales y las comunidades indígenas tarijeñas, afines en general al gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), se pronunciaron por la abstención y el rechazo al referendo, que se expresará en bloqueos de rutas para que no puedan llegar las ánforas (urnas) para el comicio y, en un último
caso, por su sustracción o incendio.
Este es el último referendo de los cuatro departamentos de la media luna, ninguno de ellos reconocido por el gobierno de La Paz. El primero fue el 4 de mayo en Santa Cruz, donde venció el Sí con el 85 por ciento de los votos válidos emitidos, mientras el No y la abstención reunió casi el 50 por ciento del padrón electoral.
Luego, el 1 de junio, se realizaron las consultas de Beni y Pando donde también triunfó el Sí con un apoyo superior al 70 por ciento y una participación electoral de poco más de la mitad del padrón, lo que provocó que los votos negativos y la abstención sumados superasen el 50 por ciento del electorado.
La Corte Departamental Electoral (CDE) de Tarija advirtió por eso que los que no voten en la consulta de este domingo serán "depurados" del padrón electoral y no podrán sufragar el próximo 10 de agosto en el referendo revocatorio de los mandatos del presidente y vice y ocho de los nueve prefectos de Bolivia.
Esa amenaza, sin embargo, contraviene la decisión de la Corte Nacional Electoral (CNE), que no reconoce estos referendos autonómicos y, por lo tanto, no autoriza esa depuración de padrones.
La CDE de Tarija identificó tres regiones del departamento donde pueden generarse enfrentamientos el próximo domingo. El titular del organismo, Miguel Angel Guzmán, indicó que las zonas conflictivas son La Huerta y Rosillas en el distrito Arce; San Diego en el de O'Connor; y Yacuiba, en el Gran Chaco.
Por otra parte, el diputado nacional William Cardozo, tarijeño del principal partido de oposición en Bolivia, Poder Democrático y Social (Podemos), acusó reiteradamente de corrupción a Cossío en las últimas semanas, con lo que abrió una nueva fractura en las fuerzas que enfrentan al presidente Morales.
"Cossío primero nos debe indicar que ha hecho con cinco mil millones de bolivianos y que nos muestre de que manera ha cambiado la calidad de vida de la población.¿Dónde están los recursos de las regalías?, porque ya no vamos a tolerar que la economía de un departamento se ponga en riego por una persona", denunció Cardozo, citado el 12 de junio pasado por el diario Los Tiempos.
Finalmente, advirtió que "a partir del 22 de junio se le vendrán los días negros, porque ha fallado a Tarija y será la población la que el 10 de agosto vote por el 'No' a la continuidad del prefecto".
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