Una ola de atentados golpea Nigeria

Todas las sospechas apuntan a la secta islamista radical Boko Haram, en combate abierto con el Ejército nigeriano en el norte del país, luego de que una decena de personas murieran durante una explosión que destruyó una iglesia católica en Abuja, y otras dos explosiones sacudieran un templo de la ciudad de Jos, en el centro del país, y en Gadaka, al noreste. El presidente, Goodluck Jonathan, calificó el incidente como "desafortunado" y advirtió que los Boko Haram no durarán "para siempre".

El choque entre los milicianos islamistas y las fuerzas militares de Abuja han causado en los últimos dos días 68 muertos.

La responsabilidad recae, entonces, el en grupo radical islamista, Boko Haram, que significa "la educación occidental es pecado". El pasado 26 de agosto, la secta asumió la autoría del ataque contra un edificio de la ONU en Abuja que acabó con la vida de una veintena de personas. Boko Haram exige la aplicación estricta de la sharía (ley islámica) en Nigeria.

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