Ana María del Carmen Pérez y Gustavo Gayá, permanecieron detenidos en el centro clandestino "Automotores Orletti", ubicado en el porteño barrio de Floresta, donde ya estaba prisionero desde hacía unos meses Ricardo Gayá, hermano de Gustavo y pareja de Ana María. Luego de ser torturados, los dos fueron asesinados, al igual que Pérez, a quien le dispararon en el vientre, donde albergaba a su hijo por nacer.
Los tres prisioneros fueron introducidos en otros tantos tambores metálicos de 200 metros, con cal y cemento, y arrojados al canal San Fernando, al igual que ocurrió con otras víctimas.
En junio último fueron encontrados, a metros del aeródromo de San Fernando otros tambores con restos humanos, que pertenecían a los diplomáticos cubanos Crecencio Galañena Hernández y Jesús Cejas Arias, secuestrados el 9 de agosto de 1976, y trasladados a Orletti, centro clandestino ligado al Plan Cóndor.
Hasta ahora, la investigación judicial estableció lo ocurrido con 68 víctimas en Orletti y el procesamiento e imputación de 19 supuestos represores, diez argentinos y nueve uruguayos.
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