Aparentemente ayer habría sido frustrado otro motín en el Servicio Penitenciario Provincial y hoy la inquietud reinante habría derivado en un nuevo levantamiento, con quema de colchones, informaron medios locales.
La intervención de guardiacárceles, policías y bomberos permitió sofocar la revuelta.
Los presos accedieron a detener su manifestación cuando se comprometió la presencia de funcionarios provinciales para expresar sus reclamos.
Poco después llegó al penal el subsecretario de Derechos Humanos provincial, Domingo Bordón, y se aguardaba que en las próximas horas también visite a los internos el ministro de Gobierno, Lázaro Fonzalida.
El motín se inició alrededor de las 7, pero a las 9.30 los presos abandonaron sus acciones de protesta.
Se informó que tanto los internos como los efectivos resultaron ilesos.
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