COLATERAL, LUGAR Y TIEMPO EQUIVOCADO,
de Michael Mann. Con Tom Cruise y Jamie Foxx.
2004, 118 min. AVH.
Lo más nuevo de Michael Mann es una pequeña y acerada gema, en la que el creador de Fuego contra fuego logra darle cuerpo a una premisa que en los papeles aparecía como sumamente forzada. Un despiadado asesino a sueldo (Tom Cruise, en el que podría llegar a ser el papel de su vida) llega a la ciudad de Los Angeles con la misión de despachar a varios testigos, en el plazo de unas pocas horas. Para hacerlo secuestra un taxi y va cumpliendo con el encargo. La relación entre chofer y pasajero, la fluidez narrativa y el carácter casi antropológico con que Mann trata la vida nocturna de L. A. son algunos de los puntos fuertes. A ellos hay que sumarles una larga secuencia de antología, en una discoteca súbitamente convertida en un infierno.
EL MISTERIO DEL CUARTO AMARILLO,
de Denys Podalydes. Con D. Podalydes, P. Arditi y Sabine Azema.
2003, 116 min. AVH.
El mayor misterio de esta nueva versión de un famoso relato de misterio (escrito por Gastón Leroux, autor de El fantasma de la ópera) es cuál es la razón por la cual resolvieron filmarla otra vez. Típico policial de salón escrito hace un siglo largo, el supuesto atractivo de El misterio del cuarto amarillo radica en resolver un enigma aparentemente imposible: ¿cómo hizo un intruso para ingresar en una habitación cerrada por dentro, sin forzar la entrada, y por qué quería asesinar a la única moradora? Seguramente sospechando la vetustez del asunto, el director Denys Podalydes no se lo toma demasiado en serio. Pero tampoco demasiado en broma, por lo cual el resultado es cosi cosa. En el reparto, Pierre Arditi y Sabine Azema, dos de los actores favoritos de Alain Resnais.
EL INFIERNO DEL BOSQUE,
de H. Hawks y W. Wyler. Con E. Arnold, Joel McCrea y Frances Farmer.
1936, 99 min. B & N. Epoca.
No es muy conocida esta comedia de aventuras dirigida por el gran Howard Hawks, quien sin embargo no pudo completarla. El productor Sam Goldwyn lo echó y puso en su lugar a William Wyler, que dirigió los últimos diez minutos. A pesar de eso, la película lleva de punta a punta el sello del director de La adorable revoltosa. Tanto por el tema de la rivalidad masculina –que muchos observadores ven como homoerotismo desplazado– como por el peso del rol femenino, que aquí es justamente la fuente de esa rivalidad. Come and get it (tal el título original) ofrece la oportunidad de apreciar en todo su esplendor a la malograda Frances Farmer, a quien Hawks consideraba la mejor actriz que jamás hubiera dirigido. Y eso que dirigió a Katharine Hepburn, Rita Hayworth y Marilyn.
SILVER HAWK,
de Jingle Ma. Con Michelle Yeoh, Luke Goss y Brandon Chang.
2004, 99 min. SBP.
Directo a video sale este vehículo asiático de acción, encaramado sobre la popularidad que la star Michelle Yeoh adquirió en Occidente a partir de su protagónico en El tigre y el dragón. Yeoh es aquí una justiciera secreta y millonaria, a quien todo el cuerpo policial intenta desenmascarar. Suerte de James Bond muy menor, llena de lujosos decorados y chiches tecno, a Silver Hawk no le sobran humor ni imaginación. Finalmente, lo que queda es lo que, se supone, siempre constituyó la flor y nata del cine hongkonés: las larguísimas y supercoreografiadas escenas de artes marciales. Yeoh luce allí sus virtudes (en sus comienzos fue partenaire de Jackie Chan), pero todo termina pareciéndose demasiado a una sobreproducida emisión de Titanes en el ring.
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