Preocupados por declaraciones de Donald Trump, delegados de 120 países, entre ellos los de Austria, Irlanda, México, Brasil, Sudáfrica y Suecia, debatieron ayer en la ONU la necesidad de una ley internacional que prohíba las armas atómicas. Del otro lado,40 países, encabezados por EE.UU., rechazaron esa posibilidad. “Esto tomará tiempo –declaró la ministra sueca de Relaciones Exteriores, Margot Wallstram–, pero es muy importante, sobre todo cuando escuchamos todo tipo de discursos de demostración de fuerza que incluyen la amenaza de usar el arma nuclear’’.