Argentina y Australia serían los únicos países cuyas poblaciones tendrían alguna chance de sobrevivir tras un eventual ataque nuclear entre Estados Unidos y Rusia, según una investigación publicada en la revista especializada Nature Food, reproducida en el diario británico The Times. Según el mismo estudio, el 90% de los británicos podrían morir de hambre ante esta hipótesis. “Interrupciones catastróficas” en la cría de animales, la pesca y los cultivos en todo el mundo, gigantescos incendios, hollín y cenizas ditribuidas en la atmósfera que bloquearían el sol son algunas de las consecuencias para las cuales, imaginan las proyecciones, el suelo criollo estaría mejor preparado.