El ministro de Seguridad provincial, Pablo Cococcioni, puso como objetivo para la mitad de la gestión de gobierno que no haya detenidos en comisarías ni alcaldías policiales. Este lunes el gobierno nacional reanudó las tareas en la cárcel federal de Coronda, que habían sido paralizadas ante la premisa de “obra pública cero”, y se estima que finalizarán a fin de año. A su vez, el gobierno provincial prevé contar en dos años con la primera etapa finalizada de la cárcel de alto perfil en Piñero. En ese marco, el funcionario destacó “una disminución muy importante” en el número de homicidios en relación al mismo período del año pasado. Cococcioni también fue consultado por la presencia del comisario retirado Daniel Corbellini –hoy asesor del Ministerio de Educación– entre los integrantes de la custodia de Karina Milei en su visita a Rosario. “En sí no es una situación de incompatibilidad, pero tampoco estoy informado ni se trata de un dependiente de mi Ministerio”, se excusó.

Tras un freno a principios de marzo por falta de pagos del gobierno nacional, finalmente este lunes la Unión Transitoria de Empresas (UTE) que tiene a cargo la construcción de la cárcel federal de Coronda retomó las tareas. La paralización  no había caído nada bien en el gobierno provincial que, en medio de una crisis seguridad y con las cárceles superpobladas, se ofreció a hacerse cargo de la finalización de las obras y a gestionarla, pero desde Nación negaron esa posibilidad. La obra está por concluirse y no es mucho lo que resta por hacer para disponer de más de 400 plazas extras. Sin embargo, la construcción estará lista para fin de año, pese a que en la Casa Gris se entusiasmaban con que fuera antes.

“Dado que falta muy poco, tengo entendido que antes de fin de año planean ponerla operativa, lo cual siempre es una buena noticia”, celebró Cococcioni este martes, en conferencia de prensa. “Hay en la provincia de Santa Fe unos 700 presos a disposición exclusiva de la Justicia federal, con lo cual entendemos que poner en marcha más de 400 plazas no va a eliminar el problema, pero lo va a disminuir sustancialmente”, añadió.

En paralelo, el gobierno provincial avanza en la ampliación del complejo penitenciario de Piñero. La semana pasada la Legislatura dio el visto bueno para que el Ejecutivo expropie los terrenos linderos a la cárcel y emplace allí una unidad para presos de altos perfil. Según explicó Cococcioni, se trata de “una obra nueva” y aseguró que no hay modelos en la Argentina que tengan el nivel de fortificación y seguridad que se le pretende imprimir al lugar. “Estimamos que en dos años la primera etapa con unas 500 plazas de alto perfil, podría estar terminada”, deslizó. “El programa de obra pública para estos cuatro años incluiría la generación de aproximadamente 4 mil plazas carcelarias”, remarcó.

En ese sentido, el ministro de Seguridad reconoció que la superpoblación es un problema en la provincia, pero señaló que puede modificarse con programas de mediano y largo plazo. “Prácticamente habíamos terminado con ese problema. En 2019 había 495 presos en comisarías de toda la provincia. Y heredamos tres veces y media esa cantidad”, cuestionó. Y agregó: “Entendemos que de aquí a un tiempo muy breve, hacia mediados de gestión, vamos a poder no solo lograr que no haya detenidos en comisarías y alcaldías policiales, sino también reducir la sobrepoblación en Coronda, Piñero, Las Flores y otras cárceles de la provincia de Santa Fe que hoy están haciendo un esfuerzo superlativo”.

Baja de homicidios

Cococcioni también se refirió a la política desplegada en materia de seguridad y, si bien se mostró cauto respecto a las estadísticas, indicó que hay una baja en la cantidad de homicidios en relación al mismo período del 2023. El funcionario habló de “múltiples factores” que explican la disminución, entre los que enumeró el endurecimiento de las políticas penitenciarias, la restructuración de la Policía de Investigaciones (PDI), y el cambio en la relación de trabajo con el Ministerio Público de la Acusación. También destacó el fortalecimiento del patrullaje preventivo y adelantó que en pocos días se van a alcanzar “niveles muy razonables” de patrulleros disponibles para realizar la tarea.

“Siempre tratamos de ser muy prudentes al trazar relaciones de causa y efecto en materia de criminalidad. Parece que nunca queremos decirlo, pero es realmente muy poco tiempo de gestión el que llevamos como para evaluar resultados con seriedad científica. Sí observamos, no lo vamos a negar porque es información indiscutible, una disminución muy importante en el índice de homicidios que está a la mitad que el mismo período del año pasado”, evaluó. “Todos estos factores en conjunto pueden tener una incidencia, aunque tenemos que esperar más tiempo para sacar conclusiones”, consideró.

El asesor infiltrado

El sábado pasado, la secretaria general de la presidencia, Karina Milei, arribó a Rosario para participar del lanzamiento de La Libertad Avanza en Santa Fe, la estrategia con la que el gobierno nacional busca llegar a las elecciones de medio término con sello propio e independencia de sus socios aliados. La funcionaria llegó sobre el final del evento, de la mano de la diputada nacional santafesina, Romina Diez, y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. De la jornada quedó una foto que con los días comenzó a llamar la atención. Allí se observa a Daniel Corbellini en lo que parece ser parte del equipo de custodios que acompañaron a la comitiva durante el evento.

Se trata del exjefe de la Policía de Investigaciones (PDI), que había sido acusado de recibir coimas para evitar que se investigase la red de juego clandestino montada por el empresario Leonardo Peiti. A principios de febrero de este año, Corbellini fue designado como asesor del Ministerio de Educación de Santa Fe, un nombramiento que había generado polémica en el ámbito político. El diputado provincial del Frente Amplio por la Soberanía, Carlos Del Frade, presentó en ese entonces un pedido de informes para que el Ejecutivo explicase los argumentos de la designación. Consultado por Rosario/12, el ministro de Educación, José Goity, había explicado que la función de Corbellini era “acompañar, asesorar y hacerse presente ante situaciones como balaceras, amenazas y vandalizaciones en escuelas”.

 

En la conferencia de este viernes, consultado por la periodista Ivana Fux, Cococcioni evitó explayarse sobre la presencia de Corbellini en el lugar. “No podría darle cuentas de lo que ocurre con otras carteras ministeriales. En lo que respecta a la Policía de Santa Fe es un agente en situación de retiro y que luego ha entrado como asesor en otra dependencia. No está a mi cargo, así que no sabría qué respuesta darle”, declaró. “Entendemos que en sí no es una situación de incompatibilidad, pero tampoco estoy informado ni se trata de un dependiente de mi Ministerio”, sostuvo sobre la posible función de custodio durante la estadía de Karina Milei en Rosario.