Alegrías compartidas en los premios que entrega el Fondo Nacional de las Artes, porque entre los ganadores de la categoría Tango -en el concurso de Música Popular Inédita 2020- figuran dos rosarinos: Diego Zavalla con el Segundo Premio ($70.000) y el grupo Trémulo con el Tercero ($40.000), mientras que la primera distinción fue para el bonaerense Ariel Aníbal Pirotti ($120.000).

“Es inesperado, totalmente. Cuando me llamaron no lo podía creer, tuve noches de poco sueño, porque esto me posibilita grabar un nuevo disco, cuando hace un año que con el grupo no trabajamos”, explica Diego Zavalla a Rosario/12. De manera complementara, Nicolás Moro –integrante de Trémulo- cuenta que “estamos que no cabemos de la alegría”. Y que sí, que hay un “tango rosarino, porque creo que los años vienen demostrando que no solamente en las producciones sino también en los hechos sociales ha habido varios puntales que sirvieron a las nuevas generaciones de músicos y músicas, bailarines y bailarinas, como la Orquesta Escuela de Tango y el Encuentro Metropolitano de Tango. Creo que todo esto ha generado un hecho social importantísimo, que tiene características particulares y hace que este tango sea diferente al que se hace en Buenos Aires y en la zona del Río de la Plata”.

Sobre su obra ganadora, Zavalla –integrante del grupo Masmédula- refiere que “trabajé durante dos años y la terminé en marzo. El concepto estuvo dado a partir de escritores y escritoras argentinos, a partir de cuyas obras escribir un tema. Elegí literatura urbana, que hablara del ser humano en la ciudad. Todos contemporáneos. De Rosario elegí a Beatriz Vignoli –redactora en Rosario/12- y a Jorge Barquero, a la entrerriana Selva Almada, de Buenos Aires a Pablo Ramos, Mariana Enríquez y Samanta Schweblin. Como me dedico al tango nuevo, me prepuse conocer qué estaba pasando en la escritura de la actualidad, ver qué me producía y escribir a partir de ahí”.

-¿Con cuáles ritmos te encontraste?

-Hay sólo un uruguayo, Daniel Mella, de quien hice una especie de murga candombe. Con Mariana Enríquez compuse una milonga bien oscura. En general, mi música se destaca por su oscuridad, es una música muy rítmica y oscura. También hay una milonga y tangos muy diferentes uno del otro, algunos más bien climáticos, lentos, y otros más rítmicos y polenta.

En otro orden, la obra ganadora del trío Trémulo –que integran María Carolina Ciani (voz), Nicolás Moro y Agustín Priotto (guitarras)- llevará por título De Refilón, y su grabación –primer disco del trío- será posible gracias al premio. “El título de fantasía que elegimos para presentarnos al concurso fue ‘Tangos litoraleños’ porque representaba un poco el espíritu, por el aire de río y los ritmos que atraviesan a la obra”, señala Moro. Y destaca: “Es un disco donde en la mayoría de los temas tenemos invitadas músicas, lo que da un poco cuenta del rol que las mujeres y las disidencias están teniendo en la producción musical y tanguera. Tenemos invitadas participando con su guitarra, contrabajo, bandoneón, percusiones; creemos que es algo de un sentido político profundo, sobre cómo el tango ha ido cambiando en los últimos años”.

De todo lo expuesto hay una paradoja, dada la cancelación por parte de la Municipalidad de Rosario del Encuentro Metropolitano de Tango, y según informan las y los músicos, la posibilidad de su no continuidad el año próximo. Por tal motivo, la Asamblea de Músicxs Rosarinxs de Tango organiza el XVI Encuentro Metropolitano de Tango en forma virtual y autogestiva, previsto para mañana y pasado a partir de las 20 en su Canal de YouTube. Del encuentro participarán los ganadores, junto a más de 50 formaciones musicales. “Desde antes de la pandemia, el estado municipal ya había cortado todo lo relacionado con el tango. Se había comunicado conmigo mucha gente del tango para señalarnos que se decidía cortar el Encuentro Metropolitano, cuando era uno de los mejores laburos que teníamos. Ahora estamos luchando porque continúe los próximos años, cuando desde el estado siempre nos ayudaron y habíamos conseguido que todos los años se contratara a todos los grupos de la ciudad”, comenta Zavalla. Por su parte, Moro agrega que “durante las ediciones anteriores, ya en enero se comunicaban con los artistas para preguntarnos y en algunos casos invitarnos a cogestionar la curaduría y la producción de algunas de las jornadas. Este año no sucedió, hubo un silencio sepulcral. Nos decidimos a hacerlo en forma virtual para visibilizarlo. Es todo muy triste y da bronca, pero este tipo de cosas también ayudan, porque generó un gran equipo de trabajo para dar forma a este festival autogestivo”.