A pocos días del balotaje que definirá quién es el próximo presidente de la Argentina, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, volvió a cuestionar el pacto entre Mauricio Macri y Patricia Bullrich con el candidato de extrema derecha, y fue contundente al afirmar que no considera que la gran mayoría de los amarillos apoye a Javier Milei.

"No veo una gran mayoría del PRO que suscriba las ideas de extrema derecha de Milei. Veo algunos que lo pueden hacer por conveniencia o veo a otros que lo apoyan a Milei porque creen que es el menos malo. Entonces, no estoy seguro de que haya una cosa mayoritaria, ideológicamente apoyando a Milei”, indicó Larreta en un larga entrevista que publica este domingo el diario Perfil.

En esta línea expresó la contradicción de Bullrich ante el apoyo explícito a la ultraderecha: “A Patricia, la escuché decir ‘las ideas de Milei son malas y peligrosas’", comentó. Y dejó otro palito para su exjefe político: “Por supuesto que (Macri) le dio señales positivas a Milei desde el principio, y eso ya muestra una diferencia de visión del país que queremos”, sostuvo el mandatario porteño. “Tengo mis convicciones y las ratifico y son diferentes a la que hoy está mostrando Mauricio”, agregó.

En ese sentido, aseguró que la construcción del Milei candidato y su camino hacia la instancia de balotaje, se caracteriza por la “incoherencia”. "Escucharlo a Milei hace 15 días decir con total bajeza, mentira, que Patricia Bullrich ponía bombas en los jardínes de infantes, y diez días después parece que es una fenómena, que es la mejor del mundo, es incoherente", sostuvo.

Y sumó otro ejemplo: “Hace un mes la dolarización, después todos sus economistas la pusieron en duda, ahora la ratifica, ¿cree en la dolarización o no? No tengo ni idea. Él dijo que no, después dijo que sí. Ahora su futura canciller, no un cuatro de copas, dice que sí, que es una genialidad, una ponderación extrema”, señaló.

Asimismo, Larreta, tal como lo hizo en conferencia de prensa hace unas semanas, ratificó que no va a votar por ninguno de los dos candidatos "porque los dos me parecen malos, y no voy a votar una mala opción para la Argentina”. “No voy a votar a Massa, definitivamente, no creo en Milei, tampoco lo voy a votar”, sentenció.

Dentro de esta postura "neutral", el jefe de Gobierno porteño, analizó que el rol de Juntos por el Cambio en esta nueva etapa política "es el de consolidar la oposición más grande en términos de presencia legislativa y más sólida posible". "Los dos candidatos que hay en la Argentina de hoy son malos. Con más razón, eso refuerza la responsabilidad nuestra como oposición, y todo lo que tenemos que hacer es para tratar de mantener la oposición lo más grande posible”, sumó.

Por último, realizó una autocrítica sobre su desempeño en la interna en la coalición opositora y la derrota que sufrió en las PASO con Bullrich. “Fui conservador en el término de no arriesgar, no hagamos olas porque estamos bien. Vamos por el conservador, no hagamos nada demasiado grandilocuente, no nos peleemos con el otro, no le contestemos al tercero, y al final perdés, porque te volvés conservador, porque crees que tenés que conservar el lugar que tenés. Y en esto hay que arriesgar a veces siendo firme en posiciones políticas, siendo claro respecto de otras personas”.

“Esto de no arriesgar, de no pelearte con nadie los americanos lo llaman el ‘catch all’, agarrar a todos, que todos nos apoyen, donde hay un componente político, pero también debe haber algún componente psicológico de que querés que todos te quieran, y al final hacés equilibrios tan grandes para que te quieran, que perdés nitidez en la política. Todo eso son las cosas que uno va aprendiendo”, añadió.

Y finalizó: “Analizar todo esto sí es constructivo, lo que no hay que caer es en el flagelarse por cada decisión, “cómo no dije tal cosa, tal día” y te rompés la cabeza, eso no sirve. —Alfonsín decía, parafraseando a Borges, que ‘había derrotas que tenían grandezas de las que muchos triunfos carecían’”.