El entrenador del seleccionado brasileño, Dunga, quien asumió por segunda vez en el cargo después del fracaso en el Mundial 2014, manifestó que sus dirigidos sienten una “presión enorme”. “Si una selección que era excepcional, que era buena, no ganó, por qué poner presión en aquella selección que se dice que es mala. Cómo les explico al hincha, a mis hijos, que lo malo gana y lo bueno pierde. Pueden decirme: ‘Ah, pero no siempre gana lo mejor’, estoy de acuerdo, pero en 24 años lo bueno tiene que ganar, entonces tenemos que ver el fútbol de una forma diferente, la técnica, la calidad, el talento es bueno, pero no es suficiente para formar una selección, un equipo”, explicó el DT.