Central terminó sufriendo ante la embestida de Racing por conseguir el empate, pero finalmente pudo ganar por la mínima diferencia para acceder a la final de la Copa Argentina. El conjunto rosarino no pudo repetir las actuaciones destacadas que viene ofreciendo en el torneo local, y sin embargo le alcanzó para dejar atrás al equipo de Avellaneda. El único gol en la noche salteña fue marcado por el delantero Marco Ruben, cuando estaba cerca de finalizar el primer tiempo. En la definición, el goleador fue asistido perfectamente por el juvenil Lo Celso. Los rosarinos son finalistas por segunda vez de este torneo, al igual que el año pasado cuando perdieron ante Huracán.

Racing dejó escapar la única posibilidad que tenía para poder ganar un título en este 2015, y ahora apuntará a jugar la Liguilla para intentar clasificarse a la próxima edición de la Copa Libertadores.

El desarrollo mostró a Racing buscando más en ofensiva que su rival, donde prevalecía la línea que formaban Noir, Cerro, Aued y Acuña, y Central ofrecía firmeza defensiva, y profundidad cuando respondía a través de los contraataques. Precisamente, en uno de ellos, los rosarinos combinaron bien una jugada rápida y consiguieron desnivelar. Lo Celso escapó de su marcador por la izquierda, vio bien ubicado a Ruben, y éste definió con un cabezazo preciso.

Racing salió a jugar el segundo tiempo con mucha actitud ofensiva, aunque se desprotegía un poco en defensa por el adelantamiento de sus líneas. Los mayores problemas llegaron cuando los de Avellaneda se quedaron con un jugador menos por la expulsión de Sánchez, y Central aprovechó los espacios para hacer circular la pelota hacia los laterales.

En el final, el ingresado Milito estrelló un remate en el palo que podía haber alargado todo a la definición por penales. Pero la pelota no entró para Racing, y se despidió la Copa con bronca, aunque entregando todo el esfuerzo de parte de sus protagonistas.