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El delantero húngaro Robert Waltner llegará hoy a la Argentina para incorporarse a Boca, y también podría venir para someterse a una prueba un marcador central zurdo de la misma nacionalidad, cuyo nombre no trascendió. Raúl Estévez se entrenó ayer con el plantel, al igual que el confirmado Diego Crosa, mientras los dirigentes continúan distintas negociaciones para sumar más refuerzos y para confirmar las posibles ventas. Un grupo de directivos viajaría en las próximas horas a México con la idea de convencer al goleador paraguayo José Saturnino Cardozo, mientras se espera por las resoluciones de los pases de José María Calvo y Clemente Rodríguez, ambos con propuestas para irse al exterior.
Tras su primera jornada de pretemporada con Boca, Estévez se mostró entusiasmado y dispuesto a cubrir las distintas necesidades del entrenador Oscar Tabárez. “Decidí quedarme en la Argentina porque me gustó mucho el ofrecimiento que me hizo Boca. Yo no prometo goles porque vengo a dar lo mejor de mí y a aportarle mi juego al equipo. Estoy a disposición del técnico y puedo jugar donde me necesiten, de siete o de nueve”, indicó el delantero al término de la jornada.
Estévez es el cuarto refuerzo de Boca, que ya incorporó a los volantes Raúl Cascini, Matías Donnet y Ezequiel González, y además está a punto de repatriar a Hugo Ibarra, quien llegaría hoy al país tras su paso por el Porto de Portugal. Otro jugador que podría volver es Mauricio Pineda, actualmente en el Udinese; aunque su llegada dependería de la venta de Calvo al Feyenoord holandés o de Clemente al Piacenza, Boca ya habría iniciado las gestiones.