ECONOMíA › LOS PRODUCTORES DE TRIGO EN LA ENCRUCIJADA

Quién defiende a quién

 Por Raúl Dellatorre

Julián Domínguez junto a Carlos Garetto (Coninagro), ayer en Leones.
Imagen: Télam.

Mientras que la polémica por las distorsiones en el mercado triguero no cesa, el ministro de Agricultura anunció, desde la llamada “Capital Nacional del Trigo, Leones, la construcción del primer parque cerealero agroindustrial de la provincia de Córdoba. El convenio firmado incluye la puesta en marcha de un fondo rotatorio destinado a pequeños y medianos productores de la zona, fundamentalmente poblada por productores trigueros. Uno de los firmantes del convenio es Carlos Garetto, presidente de Coninagro y productor de la zona. Al mismo tiempo que se anunciaba este acuerdo, un comunicado de la Mesa de Enlace expresaba que la comercialización del trigo presenta “un mercado cartelizado y distorsionado” y responsabilizó al Gobierno por permitir la creación de “un sistema clientelista, concentrador y corrupto”, controlado por las grandes exportadoras en perjuicio del productor triguero.

Las últimas estimaciones sobre la producción de la actual temporada indican que podrían alcanzarse los 14 millones de toneladas, una cifra que supera en más del 80 por ciento a la del ciclo anterior (7,5 millones). En base a esas previsiones, ayer el ministro Julián Domínguez reiteró que, en la primera semana de enero, quedarán liberadas las exportaciones para que se inscriba todo el grano excedente sobre las necesidades del mercado interno.

Pero pese a que ya se han dado diversos pasos para las liberaciones parciales y sucesivas del grano, los exportadores no están comprando la producción como era de esperar. Las pocas operaciones que se han hecho se concretaron por debajo del valor de referencia que informa el Ministerio de Agricultura (denominado precio FAS, que se calcula en base a la cotización internacional), con una diferencia en contra del productor de 50 dólares por tonelada.

Esto es lo que la Mesa de Enlace denuncia como “un mercado cartelizado y distorsionado”, pero que es producto del “mercado libre” que pregonan algunos de sus miembros fervientemente, como Sociedad Rural y Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

El comunicado de la Mesa de Enlace respondía a una solicitada publicada esta misma semana por la industria molinera. La dirigencia agropecuaria denuncia nuevamente “la maniobra especulativa por parte del sector exportador”, aprovechándose de la falta de competencia en el mercado interno al no pagar, la industria molinera, “el precio del trigo que corresponde (...), dado que se paga un 23 por ciento por debajo del FAS teórico”. La Mesa acusa a los exportadores de promover “un mercado cartelizado y distorsionado” y al Gobierno de propiciar “un sistema de comercialización clientelista, concentrador y corrupto”, en alusión a los subsidios que recibe la molinería.

El conflicto se resuelve con más intervención del Estado, como lo saben Federación Agraria y Coninagro, no con menos, como proponen Sociedad Rural y CRA. Ayer, Domínguez avanzó en un acuerdo fundacional en el corazón triguero de la pampa húmeda, con políticas que favorecerán el asociativismo y fortalecerán la cadena agroindustrial en la propia región productora. Leones será en pocas semanas más la sede de la Fiesta Nacional del Trigo. De aquí hasta ese momento, quizá las entidades deban definir más claramente su posición y abrirse a debatir de qué forma se ordena la comercialización en favor de los productores.

Compartir: 

Twitter

 
ECONOMíA
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.