EL MUNDO › EL PRESIDENTE IRANI ENFRENTA UN DESAFIO DE LOS REFORMISTAS MODERADOS

Ahmadinejad pone en juego su liderazgo

Mir Hossein Mussavi podría ser el único de los tres candidatos opositores que forzaría una segunda vuelta. Al gobierno se le critica su política con el mundo y el mal manejo de la economía.

MOHSEN REZAI

Buscado por la AMIA

En Irán existe un candidato que se considera más conservador que sus contrincantes: su nombre es Mohsen Rezai, tiene 54 años y sobre él pesa un pedido de captura internacional solicitado por la Justicia argentina y librado por Interpol por su supuesta participación en la planificación del atentado a la AMIA, ocurrido el 18 de julio de 1994. Al momento del atentado, el presidente iraní era Alí Akbar Hashemi Rafsanjani –también con pedido de captura–, mientras que Rezai servía al régimen como comandante del máximo cuerpo de elite de la República Islámica, los Guardianes de la Revolución, una milicia ultrarradical que forjó sus armas en la guerra contra Irak durante casi toda la década del ’80.

Fuertemente crítico del actual mandatario, Rezai aseguró recientemente en declaraciones recogidas por la cadena británica BBC que Ahmadinejad llevó la economía del país al borde del colapso, por lo que prometió, sin entrar en detalles, concentrar sus esfuerzos en equilibrar las cuentas públicas y combatir la inflación.

Sobre la cuestión nuclear, piedra angular del enfrentamiento entre la República Islámica y Estados Unidos, el candidato conservador mantiene una postura más realista y menos confrontativa que el actual jefe de Estado: si bien no duda en apoyar la continuidad del programa de enriquecimiento de uranio, estima que Ahmadinejad genera confrontaciones inútiles y por eso declara optar por un perfil de menor exposición.

Actualmente, Rezai es secretario de Estado en el Consejo de Discernimiento y, según sus propias palabras, corre a todos por derecha: “Me considero a mí mismo como el representante de una nueva derecha y no exagero si digo que estoy más a la derecha que todos mis contrincantes”, señaló el ahora aspirante a la presidencia por segunda vez en 2005 a la agencia de noticias oficial iraní IRNA.

MEHDI KARUBI

Ultima oportunidad

Con 72 años y una larga carrera política a sus espaldas, el clérigo reformista Mehdi Karubi se enfrenta a la que quizá puede ser su última oportunidad de lograr el sueño de ser presidente de Irán.

Activista político desde su juventud, comenzó sus estudios de religión en 1951 en la ciudad santa de Qom, desde donde viajó a Teherán para licenciarse en Teología por la Universidad de la capital. Allí se unió a un grupo de clérigos-universitarios combatientes que bajo la influencia del ayatolá Rujolá Jomeini, fundador de la República islámica, comenzó a protestar contra la autocracia del último Sha de Persia, Mohamad Reza Pahlevi. Miembro del círculo de confianza de Jomeini durante el alzamiento de 1979, meses después fue elegido diputado en el primer Parlamento islámico como representante de su ciudad natal. En 1980, el líder supremo le encomendó establecer la Fundación de los Mártires de la Revolución Islámica y un año después fue elegido miembro del Consejo para la revisión de la Constitución iraní.

Ya en 2005 decidió saltar a la primera plana y presentó su candidatura a la presidencia del país, con la que logró cinco millones de votos, que no fueron suficientes para acceder a la segunda vuelta. Otra vez apuesta a ganarle a Ahmadinejad. Con el lema “Por el cambio”, fundamenta su programa electoral en la recuperación económica a través del fortalecimiento de la industria nacional, la reducción de la dependencia del precio del petróleo y la atracción de las inversiones extranjeras.

Karubi es partidario del diálogo con Estados Unidos y con Occidente sobre el programa nuclear iraní, aunque insiste en que en ningún momento renunciará a una tecnología cuya posesión entiende como un derecho para su país. Además, se ha convertido en uno de los adalides de los derechos de la mujeres y de los jóvenes, a quienes ha prometido que reducirá la acción de la restrictiva policía moral, que vigila el atuendo y las costumbres de los iraníes.

MIR HOSSEIN MUSSAVI

Reformista moderado

Mir Hossein Mussavi, esperanza del campo reformista, se perfila como la principal amenaza para la reelección del actual presidente, Mahmud Ahmadinejad. “Me considero un reformista que preserva y vela por los principios de la Revolución”, dijo de sí mismo en plena campaña, lo que, según diversos analistas, le habría valido a un tiempo el apoyo de los jóvenes, que desean apertura, y el de sectores tradicionales que buscan cierta moderación pero recelan de los reformistas clásicos. Esos jóvenes son en su mayoría calificados de clase media.

Nacido en 1941 en la ciudad de Jameneh, en la provincia iraní de Azerbaiján oriental, Mussavi tiene fama de ser un revolucionario de la primera hora: islamista convencido, fue primer ministro entre 1981 y 1989. Su gestión económica, marcada por la guerra con Irak (1980-1988) y las sanciones económicas y financieras impuestas a Irán por la comunidad internacional, aún hoy es alabada por muchos iraníes.

Pintor y arquitecto de formación, desde el fin de su mandato pasó a ocupar diversos cargos en la segunda fila del régimen, primero como asesor del líder supremo y después como miembro del Consejo de Discernimiento, hasta que en el pasado mes de marzo decidió presentarse a la presidencia.

En materia económica, Mussavi cree que Ahmadinejad despilfarró las arcas del Estado, no supo gestionar los grandes beneficios que reportó el alza de los precios del petróleo y colocó al país rumbo a la deriva.

En cuanto a las relaciones internacionales, apoya la continuidad del programa de desarrollo nuclear, pero critica lo que denomina “aventurismo” y “extremismo” político del actual presidente, que en su opinión es la causa de un severo aislamiento internacional. Sin embargo, apoya la tesis oficial de que Obama muestre gestos y no se quede en el discurso.

Su candidatura concitó mayor apoyo nacional e internacional desde que recibió el espaldarazo del ex presidente reformista Mohamed Jatami.

MAHMUD AHMADINEJAD

Negacionista línea dura

Actual presidente, el ultraconservador Mahmud Ahmadinejad no tiene asegurada una clara victoria en las urnas y, en caso de perder, pasaría a la historia como el primer mandatario en los 30 años de Revolución Islámica que no logra revalidar su mandato. Nacido en 1956 en la localidad iraní de Garmsar en el seno de una familia humilde, Ahmadinejad se licenció en Ingeniería e inició su carrera política en la década del ‘80 en la provincia de Ardabil, donde llegaría a ser gobernador. Destituido en 1997 por el entonces presidente reformista Mohamed Jatami, Ahmadinejad no se dio por vencido: se trasladó a la capital y allí, en poco tiempo, logró ser elegido alcalde. Cuando en el 2005 decidió enfrentar en las presidenciales al ex mandatario Ali Akbar Rafsanayani, nadie creía que una victoria fuese posible. Sin embargo, con segunda vuelta de por medio y denuncias de irregularidades, Ahmadinejad dio el batacazo y llegó a la presidencia. Durante sus cuatro años de mandato el desempleo aumentó, la inflación se disparó y las ganancias petroleras colapsaron. Sin embargo, el actual presidente tiene el respaldo de los medios de comunicación estatales, cuenta con el apoyo del ejército y además la lealtad del numeroso grupo de voluntarios islámicos “Basij”, una milicia con una disciplina férrea y una gran capacidad de movilización. Además, sigue siendo muy popular en las áreas conservadoras rurales y en los pueblos. De cara al exterior, Ahmadinejad se ganó el rechazo de buena parte de Occidente y en especial de Estados Unidos e Israel mediante, por un lado, la negación del Holocausto judío, y, por el otro, su postura firme de continuar con el programa de enriquecimiento de uranio mediante el cual se persigue, según Teherán, el desarrollo de energía nuclear pacífica y, de acuerdo con Occidente, la bomba atómica. Sobre el cambio de administración en Washington, el mandatario sostuvo varias veces que, pese a que es un buen comienzo, las ofertas de reconciliación del presidente estadounidense, Barack Obama, deben pasar de las palabras a los hechos.


Compartir: 

Twitter

El voto de las mujeres y de los jóvenes podría inclinar la balanza en favor del candidato Mussavi.
Imagen: AFP
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.