En medio del debate por la permanencia de Grecia en la Eurozona, el líder de Syriza, Alexis Tsipras, le advirtió ayer a la canciller Angela Merkel que no le corresponde a ella proponer un referéndum. El Ejecutivo alemán, no obstante, negó que Merkel haya propuesto al gobierno griego celebrar dicha consulta para resolver la situación.

El referente de la izquierda griega fue recibido en París por su par francés, Jean-Luc Mélenchon, y al finalizar la reunión habló sobre la propuesta realizada por la canciller alemana, informada por la oficina del primer ministro griego, Panayotis Pikrammenos, quien detalló que el viernes Merkel sugirió en una conversación telefónica mantenida con el presidente griego, Karolos Papulias, la posibilidad de celebrar un referéndum sobre la permanencia de Atenas en el euro. La idea –que fue desmentida después– provocó los dichos del líder de la agrupación que algunos sondeos dan como ganador de los nuevos comicios legislativos griegos del 17 de junio.

Tsipras remarcó que Grecia es un país soberano, aclaró que Merkel no es quien tiene que decidir si van o no hacia un referéndum y añadió que Grecia no tiene nada que negociar con respecto al memorando de austeridad y reformas estructurales que le exigen la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI). “El memorando no se negocia. El mismo conduce al infierno y fue anulado por el pueblo griego en las elecciones del 6 de mayo”, declaró Tsipras, insistiendo en que, en caso de ganar, no aceptará negociar las medidas de austeridad impuestas a cambio de la asistencia financiera concedida por la UE y el FMI.

El dirigente consideró que el dilema planteado entre la aplicación de las medidas de austeridad y la permanencia en la Eurozona es un chantaje. Además, estimó que es improbable y riesgoso para el conjunto de la Eurozona un cese de la financiación exterior y, más aún, la salida del país del bloque dada la imbricación del sistema financiero en el espacio de la moneda común. “La probable salida de Grecia del euro puede disolver la Eurozona. Imaginemos a la misma como una cadena con 17 eslabones. Si uno de ellos se rompe, lo hace toda la cadena”, agregó.