EL MUNDO › HOY SE ELIGE AL PRIMER MINISTRO DE IRAK

Votos bajo amenaza

Las principales coaliciones se presentan a estos comicios de manera fragmentada para aprovechar los privilegios de la nueva ley electoral, que favorece a grupos políticos menores.

La amenaza terrorista y la división política están marcando los comicios legislativos iraquíes de hoy a los que están llamados más de veinte millones de votantes para elegir el tercer Parlamento de Irak desde la caída del régimen de Saddam Hussein, en 2003.

El lunes, durante su última intervención de campaña electoral, el primer ministro saliente, Nuri al Maliki, cuya coalición chiíta Estado de Derecho parte como favorita en los comicios, precisó en una entrevista difundida por la televisión estatal que apuesta por “un gobierno que se apoye en una mayoría parlamentaria”. Esa postura anuncia el fin de la idea del gobierno de unidad nacional, que se basó en el denominado acuerdo de Erbil, firmado en 2012 en esa ciudad septentrional por las coaliciones iraquíes y que estipula, entre otras medidas, la división sectaria de las instituciones del Estado, incluido el Ejecutivo.

La coalición Estado de Derecho y su principal rival, la alianza laica Al Iraqiya, dirigida por el ex primer ministro Eyad Alaui, se presentan a estos comicios de manera fragmentada, con el objetivo de aprovechar los privilegios de la nueva ley electoral, que favorece más a los grupos políticos menores.

La seguridad es el desafío inmediato que afrontan estas elecciones, pese a los grandes preparativos de la policía y del ejército, que lanzaron planes especiales e instalaron puestos de control en diferentes ciudades del país, sobre todo en Bagdad, para abortar cualquier amenaza terrorista. Las calles de la capital, que se encuentran casi vacías de peatones y vehículos civiles, están tomadas por el ejército y diferentes cuerpos de seguridad. Asimismo, varias tiendas, restaurantes y cafés optaron por cerrar sus puertas.

“Los iraquíes queremos seguridad”, dijo Iskandar al Hudal, un vecino de un barrio donde vive una población mixta sunnita y chiíta.

Las autoridades de la Aviación Civil de Irak anunciaron ayer que han cerrado todos los aeropuertos no militares del país desde la medianoche del lunes hasta el cierre de los comicios.

Los servicios de seguridad de Bagdad anunciaron asimismo que los accesos y salidas de la capital estarán cerrados a partir de las 22.00, hora local de ayer, y señalaron también que se prohibirá desde la misma hora y hasta el fin de la votación la circulación de vehículos en la ciudad.

Además, los servicios de seguridad bloquearon desde hace días las calles que llevan a los colegios electorales, con un gran dispositivo policial y militar y, en varias ocasiones, incluso con fuerzas especiales.

Pese a las precauciones, al menos 26 uniformados iraquíes murieron y 90 resultaron heridos en ataques perpetrados ayer contra diferentes centros electorales, en la jornada de votación anticipada para miembros de la policía y el ejército en estas elecciones legislativas. Si la seguridad es el centro de las preocupaciones de los ciudadanos iraquíes, los políticos están preocupados a su vez por el futuro del reparto de poder entre las distintas coaliciones, sobre todo entre las chiítas y sunnitas.

Compartir: 

Twitter

Un iraquí votando ayer en la Embajada de Finlandia.
Imagen: AFP
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.