El gobierno de Uruguay se mostró satisfecho con las críticas del jefe de Gabinete, Sergio Massa, a la decisión de los asambleístas de Gualeguaychú y Colón de cortar en forma simultánea los pasos fronterizos hacia ese país. “Es un paso adelante”, analizó el ministro de Turismo uruguayo, Héctor Lescano, aunque pidió que esas palabras se “traduzcan en hechos” y exigió un pronunciamiento sobre la “ilegalidad y lo inútil de estos cortes”, a los que no descartan sumarse también los vecinos de Concordia.

Cerrado el puente que une Gualeguaychú con Fray Bentos, las otras dos alternativas para cruzar a Uruguay son los pasos que vinculan Colón con Paysandú y Concordia con Salto. Vecinos de Colón ya anticiparon que se plegarán a la protesta en contra de la pastera Botnia y harán piquetes durante el verano. Se descuenta que interrumpirán el tránsito los fines de semana de recambio turístico.

Massa reaccionó frente al anuncio de la profundización de la protesta con un llamado a la reflexión. En ese contexto, el jefe de Gabinete pidió a los asambleístas que “entiendan que el corte de ruta no es la solución al problema y que hay otras herramientas que están en marcha” y agregó: “Los cortes de ruta son malos y el Gobierno cree que es un error. Me pregunto quién se beneficia con estos cortes, porque los únicos que se perjudican son los entrerrianos. Ellos pierden actividad comercial en Gualeguaychú y Colón”.

Las declaraciones de Massa fueron bien recibidas en Montevideo. “Ojalá que las nuevas señales se traduzcan en hechos, posibilitando la libre circulación de bienes y personas acorde a las reglas de derecho”, señaló Lescano, quien recordó que para este año “se espera por parte de la Corte Internacional de Justicia de La Haya un pronunciamiento jurídico vinculante para las partes”.

El ministro de Turismo uruguayo aprovechó, además, para defender a la pastera de las acusaciones sobre su supuesto accionar contaminante. “Datos fidedignos demuestran que la empresa no contamina, y éste es el elemento más contundente que llevó al gobierno uruguayo a no tomar medidas”, aseguró. “Espero que prime la sensatez de las otras poblaciones fronterizas y se extienda a Gualeguaychú”, remató Lescano.

El llamado a la reflexión de Massa, sin embargo, no logró apaciguar a los asambleístas, quienes evalúan también cortar el puente de Concordia. “No descartamos ningún tipo de medida”, explicó ayer Liliana Silva, de esa ciudad del norte entrerriano, y contó que “la idea es empezar a plantear cortes sorpresivos”.

El modo de sumarse a la lucha de los habitantes de Gualeguaychú en contra de Botnia aún no fue definido por los vecinos de Concordia y es motivo de discusión. Jorge Maffey, también de esa ciudad, había aclarado anteayer que “por ahora, la mayoría dice no a los cortes de ruta”. La alternativa que proponen quienes rechazan la propuesta del piquete es repartir volantes e implementar campañas de concientización para los turistas que utilicen ese paso para dirigirse a Uruguay.

Los ambientalistas que alientan el corte simultáneo de los puentes hacia Uruguay pretenden “volver a poner a consideración pública nacional el tema” de la instalación de la pastera finlandesa en Fray Bentos. “Tenemos los elementos de prueba que dio la consultora del Banco Mundial que dicen que Botnia está arrojando residuos tóxicos, tanto al río como al aire”, aseguran.