“En defensa de la democracia, ni un paso atrás.” Con esa consigna la Asociación Madres de Plaza de Mayo, que preside Hebe de Bonafini, cubrió con pañuelos anudados casi toda la verja que rodea la Casa Rosada. A las 15, hora de la habitual ronda a la Plaza de Mayo, las Madres pusieron fin a la campaña iniciada el 19 de junio pasado en medio del lockout agropecuario. “Es una forma de defender la democracia, anudando pañuelos como debemos anudarnos todos los argentinos en momentos como éste”, explicó Bonafini, en alusión a la vuelta de las protestas de los productores rurales.

Durante el conflicto entre el Gobierno y las entidades agropecuarias, la Asociación siempre se pronunció duramente en contra de la derogación de la Resolución 125 y de los sectores que la promovían. Hebe de Bonafini relató que “si bien la convocatoria se viene preparando hace más de dos meses, en coincidencia con el aniversario de la muerte del General José de San Martín, hoy (por ayer) tiene mucho sentido porque el campo vuelve a salir a la calle y va por más”. “Con el pañuelo defendimos la justicia y hoy tenemos que defender la democracia que nos costó tanta sangre, desocupación, hambre y marginados”, completó.

Al referirse a las distintas manifestaciones realizadas ayer al costado de las rutas, como el tractorazo de Villa Constitución y la asamblea de Gualeguaychú, Bonafini consideró que los sectores agropecuarios “se están lanzando nuevamente” y que “la derecha está avanzando”. “Estos señores no tienen derecho a cortar las rutas, porque, según ellos, ya ganaron en el Parlamento. ¿Ahora qué carajo quieren?”, se preguntó al hablar en la Plaza de Mayo. En su discurso, Bonafini denunció los puntos de contacto entre las dictaduras y el sector agropecuario. “Siempre la apoyaron estos que se llaman del campo como la Sociedad Rural. Siempre fue apoyada por ellos”, acusó.

La campaña que concluyó ayer consistió en la entrega de liencillos en escuelas, plazas y sindicatos de todo el país con la inscripción “En defensa de la democracia, ni un paso atrás”, que fueron anudados y llevados a la Casa de las Madres. Una vez anudados, alumnos de la Universidad de las Madres armaron bloques de pañuelos que, sostenidos por caña tacuara, fueron atados a la verja de la Casa de Gobierno con un cartel azul que decía “No pasarán”.

Si los que se dicen del campo, que son los que quieren afanarnos el campo, la derecha toda, se quieren presentar a elecciones y ganan, nos los bancaremos”, siguió Bonafini en su discurso, pero advirtió que no los dejarán “entrar por la ventana, porque son tan basura que no los quiere nadie y nadie los vota”. “Por eso –concluyó– quieren entrar por la ventana. Y, por ahí, no pasarán.”