SOCIEDAD › MARCHA EN RECUERDO DE LOS JóVENES FUSILADOS DE JOSé LEóN SUáREZ

Un homenaje y muchas críticas

En el acto por el aniversario de la muerte de dos adolescentes a manos de la Bonaerense, hubo cuestionamientos duros al ministro Casal y la política de seguridad de Scioli. Participaron el Movimiento Evita y La Cámpora. Y estuvo el vicegobernador, Gabriel Mariotto.

 Por Carlos Rodríguez

Cuando participaba de un acto donde se escucharon fuertes críticas contra el ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, el vicegobernador de la provincia, Gabriel Mariotto, afirmó que desde su función le provoca “vergüenza venir a ver a los ojos a los padres de dos chicos que fueron fusilados” por la policía. Invitado por el Movimiento Evita y por La Cámpora, Mariotto participó ayer de una marcha en homenaje a Franco Almirón (16) y Mauricio Arce Ramos (19), asesinados hace un año por agentes de la Policía Bonaerense que en el mismo hecho hirieron de gravedad a Joaquín Romero (19), quien se recuperó luego de estar dos meses internado en terapia intensiva. Refiriéndose al hecho, ocurrido luego del descarrilamiento de un tren en el barrio La Cárcova, cerca de la estación ferroviaria de José León Suárez, donde ayer se hizo el acto, Mariotto sostuvo que desde el gobierno bonaerense “se están tratando de revertir algunas situaciones desde lo más profundo de lo institucional”. En el acto de recuerdo, en el que hubo varios oradores, se realizaron críticas muy duras a la política de seguridad provincial en la figura del ministro Casal e incluso del gobernador Daniel Scioli.

Por el asesinato de Almirón y Arce Ramos, y por el intento de homicidio de Romero están detenidos los policías Gustavo Sebastián Rey y Ezequiel Vega, pero ahora los abogados querellantes reclamaron que se investigue “a los jefes policiales y a los responsables políticos que dieron la orden de reprimir”. En el documento conjunto leído ayer en el acto, se reflotó el mote de “maldita policía”, dirigida de nuevo a la Bonaerense, como ocurrió hace 15 años a partir del homicidio del fotógrafo José Luis Cabezas.

En la declaración se criticó el hecho de que “los medios hegemónicos” hayan justificado la represión ocurrida el 3 de febrero de 2011, bajo el argumento de que se había tratado de un descarrilamiento supuestamente “planificado con fines de robo”, dato nunca corroborado en la investigación a cargo de tres fiscales de San Martín. En el texto leído ayer se aseguró que el accionar policial tuvo “la direccionalidad de asesinar y criminalizar a un sector especifico de la sociedad (jóvenes pobres) y demonizar a los barrios en emergencia social”.

En ese contexto, se hizo una dura crítica a lo que dijo, en su momento, el ministro Casal. Se aseguró que la construcción de ese discurso fue posible por “el relato que hicieron de los hechos los medios hegemónicos y por el vergonzoso desempeño del máximo responsable del área de seguridad en la provincia de Buenos Aires, el ministro Casal”. Los dos chicos asesinados y el que resultó herido “reforzaban su economía familiar recolectando desechos en el predio del Ceamse”, ubicado sobre el Camino del Buen Ayre, cerca del lugar donde fueron asesinados.

Al comenzar el acto, que se hizo frente a la estación de José León Suárez, hablaron los familiares del chico Arce Ramos. Estuvieron presentes su mamá, María Elena, su tía Amelia, su abuela Juana y su hermana Ivanna. La que habló fue la abuela: “Te fuiste en plena juventud, pero igual nos dejaste el ejemplo de una vida sana, el sonido de tu voz y el recuerdo de alguien que murió injustamente y al que jamás podremos olvidar”. El texto había sido escrito por Mauricio, el abuelo de Ramos.

Antes del acto se hizo una marcha que comenzó en la esquina de Central y 2 de Abril, a metros del lugar conde descarriló el tren de la empresa Nuevo Central Argentino, y luego se pasó por el sitio donde cayeron los dos chicos asesinados y el herido. El vicegobernador Mariotto, que acompañó a los manifestantes por todo el recorrido, había visitado a los padres de los dos chicos asesinados.

También estuvo presente en el acto el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis, quien sostuvo que hay que “construir una policía democrática, para terminar con la policía que sigue decidiendo sobre la vida y la muerte” de las personas. “Acá fusilaron a dos pibes nuestros y no nos podemos olvidar. Lo que tenemos que hacer es trabajar para que la policía nunca más decida sobre la vida y la muerte de los chicos que viven en La Cárcova y en todos los barrios de San Martín. Ni un pibe menos.”

En el acto también hablaron los diputados Patricia Fernández (bonaerense) y Leonardo Grosso (nacional), quienes criticaron duramente a la policía y reclamaron al gobierno bonaerense que “avancen sobre los jefes policiales responsables de estos crímenes, porque la juventud los banca”. Con Mariotto sobre el escenario, se dio el hecho poco usual de que Emilio Pérsico, del Movimiento Evita, o José Ottavis, de La Cámpora, le hicieran las demandas en persona, llamándolo “Gabriel”, dándose vuelta en todos los casos. También estuvieron presentes los diputados provinciales de Nuevo Encuentro Marcelo Saín y Adrián Grana.

Entre los miles de manifestantes que se movilizaron se encontraba la hermana de Diego Duarte, un chico desaparecido hace ocho años mientras revolvía la basura en el Ceamse. “Seguimos pensando que lo mataron los policías de civil que hacen custodia en el lugar, pero la causa sigue sin tener ningún avance”, dijo a este diario Alicia Duarte.

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La marcha estuvo encabezada por chicos familiares de los dos jóvenes asesinados.
Imagen: Sandra Cartasso
 
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