El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, recorrió ayer el nordeste del país para evaluar los daños por la crecida de los ríos locales y afirmó que en toda la región hay más de 14 mil damnificados. Además, confirmó los beneficios que recibirán durante los próximos tres meses, con una inversión del Estado superior a los 43 millones de pesos. Capitanich reconoció que en Misiones “hay 7884 evacuados, correspondientes a 1771 familias, y 1571 viviendas dañadas”, debido al aumento del caudal del Uruguay. Por el mismo fenómeno, los evacuados en Corrientes superaban ayer las 1500 personas y, en Entre Ríos, el intendente de Concordia, Gustavo Bordet, declaró el estado de emergencia. En Chaco, la cantidad de evacuados y autoevacuados ascendió a 1100 familias, luego del repunte que tuvieron los ríos Paraná y Paraguay en los últimos dos días.

El funcionario nacional llegó ayer a Posadas con el secretario de Seguridad, Sergio Berni, y el director de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), Diego Bossio. En su visita sobrevoló distintas localidades afectadas de Misiones, Formosa, Chaco y Corrientes.

En Misiones, la evaluación se centró en las localidades de El Soberbio, San Javier, Panambí y Alba Posse, donde el desborde del Uruguay continuaba ayer y afectó a más de 6000 personas que fueron alojadas en escuelas, clubes y salones parroquiales.

Después de la recorrida, Capitanich reiteró los anuncios realizados el lunes por la presidenta Cristina Fernández y firmó un convenio de colaboración y asistencia técnica y financiera con el gobernador de Misiones, Maurice Closs.

Por la crecida del mismo río Uruguay, en Corrientes ayer había unas 1500 personas evacuadas. Las localidades más afectadas son Santo Tomé, que estaba aislada, y Alvear, en donde el río llegó a las zonas pobladas.

“En Alvear el río llegó a zonas pobladas y se evacuaron 70 personas que ubicamos en una escuela, una sala municipal y seguimos buscando lugares, porque estimamos que esta tarde la cantidad puede llegar a 100 personas”, dijo el concejal Gilberto Echeverría. En esa localidad, situada a 440 kilómetros de la ciudad de Corrientes, el río registró ayer una altura de 12,48 metros.

En Santo Tomé, a 387 kilómetros de la capital provincial, se vivió la situación más comprometida por el avance de las aguas. Al mediodía de ayer se reportaron 1458 evacuados, de acuerdo con lo informado por la comuna. Allí el río tuvo una altura de 17,34 metros, aunque el Uruguay se mostraba estacionario con tendencia bajante.

Esta situación también provocó el corte preventivo en varios tramos de la Ruta Nacional 14 y de caminos provinciales. “Estamos con la ciudad aislada, tanto por la Ruta Provincial 94 como por la Ruta Nacional 14, en acceso norte y sur”, indicó el intendente de Santo Tomé, Víctor Giraud.

En Puerto Barranqueras, Chaco, el río Paraná registró ayer a la mañana 6,57 metros, informó Prefectura Naval Argentina, lo que significó una suba de más de medio metro desde el sábado. La suba del Paraná impactó también en las comunas de Colonia Benítez, Puerto Vilelas y Basail.

El ministro de Desarrollo Social provincial, Roberto Lugo, aseguró que “son numerosos los inundados que dejaron la costa y fueron a esperar la bajante en viviendas de sus familiares”.

En tanto, el intendente de Concordia declaró el estado de emergencia por la crecida del río Uruguay y dispuso que los organismos comunales comiencen con las evacuaciones preventivas de pobladores que podrían verse afectados por la inundación.