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No quiso responder a ninguna acusación. El director interino de la oficina Mercosur de la Unesco, Herman van Hooff, rompió el silencio, pero se limitó a detallar las tareas de restauración inmediatas de Villa Ocampo. “No hago comentarios”, fue su escueta respuesta ante los cuestionamientos sobre el cuidado de la histórica mansión, que se incendió el lunes, y el manejo de los fondos legados por la escritora para la conservación del lugar.
En diálogo con Página/12, Van Hooff informó que está en marcha la construcción de un techo provisorio, para evitar que futuras lluvias dañen el interior, luego de que el fuego destruyera los techos del segundo piso. Las obras fueron acordadas con la Dirección Nacional de Arquitectura y la Comisión Nacional de Museos. “Estamos trabajando con los dos organismos para definir las obras inmediatas para evitar daños futuros”, precisó. Van Hooff viajó desde Montevideo a Buenos Aires el martes. Ayer informó que “conservadores” especializados están inspeccionando los bienes muebles que se encontraban en la casa. “Estamos viendo las condiciones de los libros y si los vamos a trasladar a otro lugar”, señaló. Entre las opciones, se baraja la posibilidad de mudarlos transitoriamente a la Biblioteca Nacional.
Sobre el futuro de la Villa Ocampo, dijo que continuarán las obras de restauración externa que se estaban realizando antes del incendio con fondos del Estado nacional. Según estimó, se extenderán por 9 meses. “La restauración interna se hará en función del proyecto cultural que defina el consejo de administración de Villa Ocampo”, aseguró. Ese organismo está integrado por la Unesco y representantes del gobierno nacional y de tres ONG.