El noveno acusado por el caso de la niña wichi de 12 años violada en Alto La Sierra, en el norte salteño, negó haber participado del crimen y aseguró que ese día trabajó hasta la madrugada en su local comercial y luego se fue a dormir. Sin embargo, la fiscalía solicitó que siga detenido.

En la audiencia de imputación, Juan Verón sostuvo que el 29 de noviembre, cuando ocurrió el crimen, trabajó hasta la madrugada, y que luego se durmió. En su declaración no habló sobre lo que hizo esa tarde, cuando la menor fue hallada abusada en una cancha de fútbol.

Verón fue detenido el 11 de agosto en el paraje Alto La Sierra, después de que un testigo, durante una declaración realizada por circuito cerrado de televisión, asegurara que lo había visto y que era el noveno participante de la violación de la niña. La orden la dio el fiscal penal Pablo Cabot, quien encabezó la audiencia de imputación en su contra, por ser sospechoso del delito de abuso sexual gravemente ultrajante.

Según lo informado por la fiscalía, Verón afirmó que la noche previa, o sea el 28, atendió su local comercial, en Alto La Sierra, y que desde la noche hasta la madrugada del 29 de noviembre trabajó allí como mozo. Posteriormente, aseguró que se fue a dormir hasta pasado el mediodía, pero al referirse a lo que hizo por la tarde, Verón no aportó una coartada.

La niña fue hallada desvanecida, el 29 de noviembre de 2015 a las 16, tras haber sido violada. Por el abuso quedó embarazada, pero no se le practicó un aborto no punible a pesar que es una niña, fue víctima de violación, y su salud se veía afectada por la continuidad del embarazo.