Entre las conclusiones que dejó la asamblea mundial de Amarc está una declaración oficial, fruto de los debates entre los participantes. A continuación, algunos extractos:

- “En un mundo donde el desbalance de poder y la desigualdad crecen día a día, los proyectos de las radios comunitarias están orientados por el cambio social (...) Comparten el deseo de vivir en sociedades justas. Comparten la voluntad de democratizar las comunicaciones para democratizar las sociedades. Comparten la decisión de contribuir a la construcción de estos horizontes desde la libertad de expresión a través de la radiodifusión comunitaria.”

- “La construcción de democracia requiere de diversidad de voces, de un espacio público de deliberación acerca de las condiciones de convivencia en sociedad (...) Quienes padecen la desigualdad económica, cultural, de género, entre otras, suelen padecer, también, la exclusión en el acceso a los medios de comunicación. Las radios comunitarias emergen como un intento por hacer visibles a quienes han sido invisibilizados.”

- “No hay democracia sin la expresión de las diferencias, sin la circulación de la crítica, sin la confrontación apasionada, sin la experimentación política, sin la explicitación de los objetivos y las perspectivas contenidas en los debates de la sociedad. Las radios comunitarias son lugares estratégicos para la emergencia de las diferencias y de los acuerdos en el espacio público, condiciones indispensables para construir la democracia.”

- “Consideramos que el proceso de elaboración de nuevos marcos jurídicos, así como de políticas públicas, exige la participación efectiva y la articulación de diferentes actores sociales. El reciente proceso de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual en Argentina constituye una referencia en este sentido.”