Los Juegos de Río de Janeiro 2016 ofrecen para el mundo atractivos como vóleibol playa en Copacabana, final de fútbol en el Maracaná, vela a orillas del Pan de Azúcar y llegada de maratón en el Sambódromo, pero también muchos interrogantes. El principal es simple, pero la respuesta no aparece: ¿cuánto costarán los Juegos? El presupuesto de los próximos Juegos es hoy un secreto bien guardado, lo que preocupa incluso al presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge. “Estamos trabajando junto al comité organizador y estamos pidiendo que se lo termine lo antes posible”, dijo el belga en una rueda de prensa ayer en Londres, al ser interrogado acerca de los “oscuros” números de los próximos Juegos Olímpicos.

El director ejecutivo del comité organizador, Leonardo Gryner, rechazó las críticas de medios brasileños, que afirman que desde 2009 no se informa de lo que se está gastando y se prevé gastar. “No hay misterio. La estimación de los costos está en el dossier de candidatura. Pero un presupuesto completo depende de que se terminen todos los proyectos ejecutivos de las obras, y todavía faltan algunos”, dijo a la agencia DPA Gryner, quien afirmó que espera divulgar una primera versión del presupuesto “en el primer semestre de 2013”.

El número dos del comité organizador local es más elocuente cuando se le pregunta qué ofrecerá Río al mundo en 2016. “Serán Juegos de pasión y de transformación”, afirmó, al asegurar que la “Ciudad Maravillosa” ofrecerá al mundo “un abrazo multicultural” y una fiesta callejera permanente.

“En Brasil nos gusta festejar. Así somos los brasileños. En el Año Nuevo hay dos millones de personas en las calles, y creo que esto también estará presente en 2016”, afirmó.

Gryner aseguró, por otra parte, que los brasileños han “aprendido mucho” de la cita británica, en especial sobre la importancia de “estar preparado y planificar con antelación”, pero que al mismo tiempo esperan ser mejores en algunos aspectos, como por ejemplo evitando que haya asientos vacíos en los estadios. “Para todas las ciudades que reciben Juegos Olímpicos, los asientos vacíos son un desafío. Esto suele ocurrir en los primeros días. En nuestro proyecto de candidatura hemos presentado algunas ideas creativas (para solucionar el problema) y esperamos hacerlo mejor que Londres”, dijo.

A menos de cuatro años del inicio de los primeros Juegos Olímpicos de Sudamérica, el dirigente asegura que todo el proyecto entregado al COI está siendo cumplido, que todas las obras han sido iniciadas y que todos los lugares de competencia serán entregados hasta diciembre de 2015, a tiempo de ser probados antes de los Juegos.

Además sostuvo que los de Río 2016 serán unos Juegos “de transformación”, y contribuirán a cambiar radicalmente la vida de los cariocas, que se beneficiarán de la creación de un centro de entrenamiento olímpico, de la modernización de áreas deprimidas de la ciudad, como el puerto, y de una mejoría del sistema de transporte urbano, que incluirá un sistema rápido de autobuses y dos nuevas líneas de metro, que ampliarán la red actual de 41 a 94 kilómetros.

Los problemas que enfrenta Río a cuatro años de sus primeros Juegos Olímpicos preocupan incluso a Pelé, quien en Londres admitió su inquietud, en especial de cara a la primera gran cita deportiva que recibirá Brasil: el Mundial de Fútbol de 2014. “Por el momento, y para ser honesto, tengo que decir que no está listo. Tenemos pequeños problemas de construcción. Estamos preocupados por la comunicación y el transporte, que no están bien por ahora”, afirmó O Rei.