“No se imaginan el miedo que tenía antes de entrar a la cancha... una presión durante el partido, sentía que me acalambraba. No es porque quiera quedar bien con ustedes, pero saben la fuerza que me dieron, miro el estadio y no lo puedo creer.” Emocionado por la conquista, Carlos Berlocq les habló así a los fanáticos que asistieron al estadio.

“Es el día más especial de mi vida, deportivamente hablando”, confesó. “Todos deseamos muchísimo esto, siento que logramos una hazaña, un triunfo de equipo”, dijo, dejando en claro que le gustaría estar ante República Checa. “Estaba 0-40, 30-40 y cuando la dejé corta, dije: ‘Si no erra ésta, no erra más’”, contó, sobre el cierre del partido.

“Pude darle un punto para pasar la serie, pero los muchachos ganaron los otros dos que necesitábamos, fuimos un gran equipo”, destacó Berlocq. “Era impresionante lo que me transmitía el equipo, y me daban mucha fuerza. Por eso yo seguía y seguía, aunque estaba con el físico al límite.”

“Felicitaciones a Charly Berlocq por su gran victoria en el quinto punto, y al equipo en general por el triunfo ante Francia”, escribió en Twitter Juan Martín Del Potro, el gran ausente del equipo nacional. La relación entre Del Potro y el resto del equipo argentino quedó deteriorada luego de que el tandilense anunciara que en 2013 privilegiaría su carrera personal.

“Que le hayamos ganado es una sorpresa. Teníamos confianza, pero es una sorpresa”, reconoció el capitán del equipo, Martín Jaite. “En los últimos diez años hubo muchos triunfos que causaron impacto. Este fue una sorpresa, pero sabíamos que podíamos hacerlo.”

Jaite consideró que la clasificación a la semifinal “fue un premio que lograron todos, los que jugaron y los que estamos afuera, pero los que estamos afuera somos unos agradecidos a los que jugaron”.

El capitán del equipo francés, Arnaud Clement, y Gilles Simon admitieron estar “decepcionados” por la derrota. “Estoy extremadamente decepcionado, tenía muchas ganas de ganar este punto en nombre de todo el equipo, pero hay que asimilarlo y seguir adelante”, dijo Simon. “No me ayudó para nada el público, pero ya sabía que iba a ser así. Argentina tiene uno de los mejores públicos y lo usan bien a su favor. Los jugadores utilizaron bien la ventaja que eso implica.”

Clement explicó los cambios de humor de su equipo: “Al comienzo pensábamos que era posible porque (Jo Wilfried) Tsonga había hecho un gran partido. Sabíamos que iba a ser complicado, sea quien fuere el adversario”, sostuvo el capitán galo. “Tenemos que ser realistas, teníamos enfrente a un equipo bien armado. Ellos supieron jugar delante de su público.”

Los franceses alentaban esperanzas después de la sencilla victoria de Tsonga frente a Mónaco (foto), en el arranque de la jornada. “Tsonga estuvo en un nivel muy pero muy bueno, diferente al que había mostrado el viernes. Intenté hacer de todo, pero el partido se me hizo cuesta arriba”, reflexionó el tandilense. “Fue muy agresivo y no me dio chances.” El top-ten francés, en cambio, no desplegó ningún elogio para con su derrotado.

“Mónaco es un tenista que corre mucho, pero no posee armas para desestabilizarme, y además jugué un gran partido, mucho mejor de lo que lo había hecho el viernes”, dijo el tenista de Le Mans. “Pude pegarle más fuerte a la pelota y también subí a la red a definir varios puntos. Estoy satisfecho, pero no feliz porque no logramos el objetivo de ganar la serie.”