En una sentencia que valoriza al socio como el dueño verdadero del club y a los dirigentes como sus administradores, la Justicia, con las herramientas que faculta la Ley 25.284 de Fideicomiso para Entidades Deportivas, sale al rescate de Ñuls, como lo peticionaron los patrocinantes de la entidad del parque Independencia el pasado miércoles. El juez Civil y Comercial Nº 17 Alejandro Martín, a cargo en suplencia del juzgado vacante Nº 12 donde se constituye el expediente del concurso preventivo rojinegro, resolvió dar cobijo legal a la situación financiera y económica de club, disponiendo de la constitución de un órgano fiduciario por donde, inexorablemente, deberán pasar a verificar todos aquellos acreedores que aparecieron tras la caída de Eduardo López.

El pedido de reclamo de transformación de concurso preventivo a fideicomiso para clubes, tal cual lo describe la le ley de Régimen Especial de Administración de las Entidades Deportivas con Dificultades Económicas, fue rápidamente aceptada por Martín, quien a 48 horas de recibir el escrito de los abogados rojinegros entregó la sentencia que consagra la restauración financiera de la institución, que con la caía de López en las urnas no dejó de entregar cotidianos trastornos a la tesorería.

Ante lo resuelto se constituirá un órgano fiduciario que tendrá como función evaluar la veracidad de las acreencias y supervisar los créditos del club, para evitar medidas cautelares que paralicen la libre disponibilidad de fondos. En este punto, los abogados solicitaron que "se apele a los colegios profesionales de Ciencias Económicas y de Abogados y a la Dirección del Deporte de la Municipalidad, para que esta última designe a un experto en administración deportiva". Pero Martín no dio detalles de cómo se compondrá el futuro órgano fiduciario, dejando abierto tal análisis hasta que los socios, en asamblea, convocada para el 17 de junio, estudien y aprueben el auxilio judicial requerido por los asesores legales.

Lo dispuesto por el magistrado no tiene antecedentes en clubes del país, puesto que nunca antes se aplicó la Ley 25.284 en un club concursado, y menos aún con la particularidad de preservar el ámbito de discusión societario (las asambleas) y la facultad de gobierno de sus legítimas autoridades. Lo que Martín no aceptó fue levantar las medidas cautelares que pesan sobre Ñuls (embargos), pero esto se podrá rever una vez que los socios aprueban el recurso presentado por los abogados. "Con esta medida vamos a poder defendernos de todas las deudas inventadas que nos reclaman. Con esto Ñuls se salva", recalcó el presidente Guillermo Lorente.