En julio de 2013, Ramón Alfredo Olivera, hijo de Pedro Adán, ratificó en la Justicia lo que había declarado ante la comisión provincial de derechos humanos en 1984, cuando sostuvo que Milani como teniente del batallón de Ingenieros de Construcciones 141 de La Rioja, en la década del 70', participó en la detención de su padre y lo hostigó a él en un interrogatorio mientras permanecía detenido.

En su declaración ante la Justicia, Olivera aseguró: "Anduvieron mucho tiempo en vehículo, pero después me vuelven a la cárcel, yo creo que finalmente declaré en la cárcel (...) Me hicieron como simulacro de fusilamiento en todo momento. Me decían que yo tenía que colaborar, que ellos ya estaban en el Gobierno e iban a estar 40 años (...) Milani me dijo 'a vos te cortamos la carrera' aludiendo que me habían cortado la carrera de guerrillero".

Milani en mayo pasado se defendió al indicar que "se probó que cuando ocurrieron los hechos contaba con 21 años de edad y que el 12 de marzo de 1977 no estaba a cargo, ni pude haber participado del procedimiento que concluyó con la detención del señor Pedro Adán Olivera (padre del denunciante)".

La fiscalía actuó en primer término a través de Martha Kunath, ante la inhibición del titular, Darío Illanez, y recién luego recayó en Salman. Según trascendió, Herrera Piedrabuena argumentó que la fiscalía no había cumplido con "las mínimas garantías constitucionales". En La Rioja se aguarda que la Procuración de la Nación designe un nuevo fiscal, si es que Salman se aparta.

Al actual titular del Ejército también se le sigue otra causa en Tucumán por la desaparición del soldado Agapito Alfredo Ledo, ocurrida el 17 de junio de 1976, cuando Milani lo tenía a cargo durante el denominado "Operativo Independencia".