Tras sostener que el PP es un partido "fiable e independiente", Rajoy afirmó que cuenta con "muchos activos" que le pueden permitir formar "cincuenta gobiernos infinitamente mejores de los que ha formado el señor Rodríguez Zapatero".

Fiel a su estilo confrontativo, el líder de los conservadores populares expresó que el objetivo del PP es sólo uno: "Ganar las elecciones generales y gobernar España".

"Todo lo demás ahora no me importa", añadió con tono más elevado que de costumbre. "El nuestro será un gobierno como Dios manda", según informó la agencia Europa Press.

Su elección, a la que calificó como "un gran honor", fue tomada por la Junta Nacional de su partido por aclamación.

Rajoy aprovechó la ocasión para "exigir" a los populares que tengan como "único objetivo" el ganar los comicios y gobernar España.

"Exijo al PP que se dedique a este único objetivo, que haga el máximo esfuerzo. Lo demás no nos importa. Pido sentido común y que se pongan todos los medios para este objetivo", dijo Rajoy.

Rajoy ya fue candidato presidencial en las elecciones del 24 de marzo de 2004, celebradas 13 días después de los atentados al servicio de trenes en Atocha que causaron 191 muertes.

Ese hecho, precisamente, terminó siendo determinante para que el PP perdiera el Gobierno que con mano de hierro sostuvo por dos períodos José María Aznar, y pasara casi sospresivamente hacia los socialistas representados por Rodríguez Zapatero.

Tal vez por eso, Rajoy anticipó que serán prioridades de su futuro gobierno la derrota de la organización separatista vasca ETA, la mejora del bienestar de los españoles, la inmigración y la seguridad.

Fuente: Télam