Alvarez, de 82 años, debe presentarse ante el juez Luis Charles, quien lo notificará de su procesamiento por el delito de desaparición forzada formulado por la fiscal Mirtha Guianze, y fuentes judiciales citadas por Ansa estiman que luego del trámite quedará detenido.

Además de Alvarez, quien comandó los últimos cuatro años de la larga dictadura uruguaya (1973-1985), deberán presentarse ante el mismo magistrado los oficiales en retiro de la Armada Jorge Tróccoli y Juan Carlos Larcebau, acusados del mismo delito.

Versiones de prensa indicaron en los últimos días que en la órbita judicial "se considera un hecho" que Charles determinará el procesamiento de Alvarez y de los otros dos indagados.

Es la primera vez que un juez recurre en Uruguay a la figura delictiva de desaparición forzada, incorporado a la legislación en octubre del año pasado, que prevé una pena de cárcel de 25 años por tratarse de un crimen de lesa humanidad y de carácter permanente, hasta el hallazgo de los restos de las víctimas.

Alvarez fue comandante del Ejército entre febrero de 1978 y el mismo mes del año siguiente. Posteriormente pasó a retiro y en setiembre de 1981 fue designado presidente de facto hasta el final de la dictadura en 1985.

Si Alvarez es procesado, será el segundo dictador en ir a la cárcel, dado que en noviembre del año pasado, Juan María Bordaberry fue encarcelado por los asesinatos en 1976 en Buenos Aires de los ex legisladores Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz y de los ex militantes tupamaros Rosario Barredo y William Whitelow.

Posteriormente a esa sentencia, la jueza Graciela Gatti agregó a su causa otros diez homicidios de opositores políticos.

La justicia uruguaya se halla abocada a la investigación de presuntos traslados por tierra, aire y mar en forma clandstina de al menos 40 militantes políticos uruguayos capturados en la Argentina en 1978.