Tras los ataques ejecutados por Estados Unidos junto a Reino Unido y Francia contra el régimen sirio, el gobierno de Donald Trump anunció sanciones económicas contra Rusia por su apoyo a Bashar al Assad. Por su parte, el presidente francés Emmanuel Macron adelantó que planteará una nueva resolución ante el Consejo de Seguridad de la ONU. Sin embargo, ninguno de los tres países esperaron una resolución de ese Consejo ni consultaron a sus parlamentos para lanzar los bombardeos contra Siria.

Según adelantó la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, Washington impondrá nuevas sanciones económicas a Moscú que dará a conocer hoy el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin. Serán sancionadas empresas que fabriquen productos relacionados con el presidente sirio, Bashar al Assad, o con el uso de armas químicas, explicó Haley, en una entrevista con el canal CBS. Según la diplomática estadounidense, es un problema que Rusia siga apostando por los aliados equivocados. En otra entrevista con Fox News, Haley criticó también al Kremlin por su papel en el conflicto de Ucrania y por su colaboración con Irán. 

El anuncio llega después de que Estados Unidos, Francia y Reino Unido lanzaran el viernes 105 misiles contra objetivos sirios, en respuesta por un presunto ataque químico contra la población siria de Duma el 7 de abril. Los tres países culpan del ataque al gobierno de Al Assad, aunque éste lo niega, al igual que Rusia, su principal aliado. Según el ejército ruso, el ejército sirio consigó derribar 71 de los 103 misiles lanzados en el ataque y no hubo muertos. 

Francia, en tanto, quiere intentar desactivar el conflicto sirio con una nueva resolución ante la ONU, informaron ayer fuentes diplomáticas en Nueva York. El gobierno de Emmanuel Macron (ver aparte) quiere que la resolución incluya el fin demostrable del programa de armas químicas sirio y que se aclare quién fue responsable de los ataques químicos en el país. También contemplaría un alto el fuego y el acceso de ayuda humanitaria, para allanar el camino a una solución política de un conflicto que lleva siete años. El otro punto fundamental sería la derrota de la milicia terrorista Estado Islámico (EI) en Siria.

Tras el fracaso de las votaciones de varios borradores de resolución sobre Siria en los últimos días, los miembros del Consejo de Seguridad podrían tomarse esta vez más tiempo para tener más probabilidades de éxito. 

El gobierno de Macron intenta impulsar su iniciativa diplomática también durante una reunión de los ministros de Exteriores de la Unión Europea que se celebrará hoy en Luxemburgo. El ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, explicó que el gobierno germano utilizará sus canales con Rusia para intentar que Moscú tenga una postura constructiva. 

Francia ya se mostró el mismo sábado dispuesto a adoptar iniciativas políticas para poner fin al conflicto sirio. Su ministro de

Exteriores, Jean-Yves Le Drian, llamó ayer a Rusia a ejercer presión sobre su aliada Siria para poner en marcha un proceso de paz. “Ojalá Rusia haya entendido que tras el bombardeo contra el arsenal de armas químicas de Siria hay que aunar esfuerzos para poner en marcha un proceso político en el país árabe, dijo Le Drian en declaraciones que recoge el diario Le Journal du Dimanche. Francia está dispuesta a ello, pero Al Assad bloquea el proceso, por eso Moscú debe intervenir, añadió el ministro.

Washington y París han dejado claro que están dispuestos a volver a intervenir si vuelven a utilizarse armas químicas en Siria. 

Pero el presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió ayer que el lanzamiento de más ataques militares por parte de Occidente contra Siria harían peligrar gravemente las relaciones internacionales. “Si se continúa con esas actuaciones, que violan la Carta de las Naciones Unidas, se originaría un ‘caos’ internacional, dijo Putin durante una conversación telefónica con el presidente iraní, Hassan Rohani, informó el Kremlin. 

Según Rusia, entre los objetivos del ataque estaban un centro de investigación científica en Damasco, un cuartel de la Guardia Republicana siria, una base de defensa antiaérea, varios aeropuertos militares y almacenes con armas.

Tanto Putin como Rohani, principales aliados de Al Assad, condenaron los ataques lanzados el viernes, que en su opinión dañaron gravemente la evolución política en Siria, afirma el comunicado.

Rusia y Estados Unidos protagonizaron el sábado un cruce de acusaciones durante una sesión del Consejo de Seguridad de la ONU convocada por Rusia. Moscú no consiguió que se aprobase una resolución de condena de los ataques a Siria. 

En tanto Al Assad denunció una campaña de “falacias y mentiras de Estados Unidos” y sus aliados en el Consejo de Seguridad de la ONU, como epílogo al bombardeo que destruyó instalaciones militares en Siria. “La agresión tripartita con cohetes contra Siria estuvo acompañada de una campaña de falacias y mentiras en el Consejo de Seguridad por parte de los mismos países agresores contra Siria y Rusia”, lamentó Al Assad ayer durante una reunión con una delegación parlamentaria rusa en Damasco.

Por otro lado, los expertos de la Organización para la Prohibición delas Armas Químicas (OPAQ) continuaban ayer con su investigación sobre el presunto ataque químico en Siria. Hoy el Consejo Ejecutivo del organismo celebrará una reunión extraordinaria en La Haya.