La oposición parlamentaria insistirá mañana en darle media sanción en la Cámara de Diputados al proyecto que pone límites al tarifazo del Gobierno en los servicios públicos esenciales, pero ya sin la rebaja del IVA en el texto original. La decisión de quitar el capítulo de la rebaja impositiva en las boletas de luz, gas y agua, que adoptaron los diputados de Argentina Federal y el Frente Renovador (que redactaron el proyecto que con disidencias apoya el grueso de la oposición), fue para descomprimir el descontento de algunos gobernadores peronistas cuyas provincias se verían afectadas por la disminución del impuesto coparticipable. Aunque desde Casa Rosada redoblan la presión sobre los gobernadores, la estrategia no parece dar resultados: el gobernador cordobés Juan Schiaretti –que se había alineado con el gobierno central– dio libertad de acción a sus diputados para acompañar la iniciativa opositora en el Congreso. Cambiemos igual negocia una sesión conjunta para emparejar la casi segura derrota con la aprobación de la reforma al mercado de capitales que reclama el Presidente.    

Como adelantó PáginaI12, federales y massistas habían admitido ante este diario que la rebaja del IVA que propone el proyecto contra el tarifazo era “materia de negociación”. La posibilidad de eliminar el capítulo del IVA para los servicios públicos (que proponía la reducción 21 por ciento al 10,5) era para vencer la resistencia de algunos gobernadores que reniegan del “costo fiscal” que implica para sus provincias. El principal argumento que esgrimió el Gobierno de Cambiemos para presionar a los gobernadores y restarle apoyo de las provincias a la iniciativa opositora. 

Ya sin la rebaja del IVA como parte del debate, la oposición volverá a la carga mañana en la Cámara baja para aprobar el proyecto que retrotrae las tarifas a noviembre de 2017, estabilizarlas por 12 meses y atar los futuros aumentos al índice de variación salarial para los hogares y al índice de precios mayoristas para pymes, cooperativas y empresas recuperadas.

La inclusión de la rebaja del impuesto nacional en el proyecto, fue en sintonía con la primera reacción de los gobernadores contra el proyecto que el Gobierno envió al Senado, para que provincias y municipios carguen con el “costo fiscal”  de morigerar las tarifas quitando impuestos propios.      

De todas maneras, el massismo insistía en mantener la rebaja del IVA para las pymes pero terminó por privilegiar el acuerdo político que tejen con los federales: ambos volverían a mostrarse juntos el jueves y viernes en Mendoza, como ya lo hicieron antes en Gualeguaychú y Córdoba. Un encuentro que se potenciaría si el miércoles la oposición me media sanción en la Cámara baja al proyecto contra el tarifazo que redactaron sus diputados.

Para el Frente para la Victoria, la eliminación del capítulo del IVA no es un problema. La reducción impositiva no era parte de su propio proyecto, aunque el principal bloque opositor firmó en disidencia la iniciativa de federales y massistas para no romper el frente opositor contra el tarifazo.

El Gobierno que enarboló la reducción del IVA para amedrentar a los gobernadores con el costo fiscal que significaría para las provincias, se quedó sin estandarte. Aunque no abandona la presión a pesar de los escasos resultados que esperaban en Casa Rosada. Schiaretti –que cuestionó que el Congreso legisle sobre una atribución del Ejecutivo– liberó a los cinco diputados de Córdoba Federal, después que estos solicitaran públicamente libertad de acción para acompañar la iniciativa opositora. El mandatario cordobés tomó la decisión luego de que los intendentes de Cambiemos, Ramón Mestre (UCR) y Oscar Tamis (PRO), presentaron una demanda en la que le reclaman al gobierno provincial 405 millones de coparticipación.

En tanto, Cambiemos volvió a virar su estrategia legislativa. Primereó a la oposición al convocar a una sesión especial sin tarifas en el temario y con la ley de Financiamiento Productivo (reforma al mercado de Capitales) como anzuelo para gobernadores y la oposición dialoguista. Pero federales y massistas, junto al Movimiento Evita, convocaron una sesión propia con Tarifas y Financiamiento Productivo, que diluyó la maniobra. Ante el probable fracaso oficialista para juntar quórum propio, Cambiemos comenzó a negociar una sesión conjunta con ambos temas, que ayer retomó con una exigencia: arrancar con la forma al mercado de capitales que quiere Macri. 

Una postura que rechaza el FpV-PJ: “Después de lo que pasó la semana pasada con el dólar, es más prioritario que nunca que el Congreso dé una respuesta institucional a la principal preocupación de la gente, que no puede pagar estas tarifas. No nos oponemos a una sesión conjunta, pero el primer tema a tratar deben ser las tarifas”, dijo su jefe de bloque, Agustín Rossi, a PáginaI12. Las negociaciones continúan, mientras el oficialismo prepara una cena para esta noche con todos sus diputados, donde pulirán la estrategia que adoptará en el recinto y que buscará animar a su propia tropa ante la posibilidad de una derrota el miércoles en el recinto.