Un hombre apuñaló a su pareja, embarazada de gemelos, ayer por la tarde en la localidad mendocina de Luján de Cuyo. Al intentar huir por la ruta provincial 82, atropelló y terminó matando a dos policías, que murieron. La mujer atacada, que tiene un embarazo de 20 semanas, fue trasladada de urgencia al hospital Lagomaggiore para ser atendida por heridas en el brazo derecho y la zona abdominal.

Según informó la policía, el hombre atacó a puñaladas a la mujer y huyó en una camioneta Ford Ranger color bordó. Tras la fuga, se montó un operativo para seguirlo hasta Blanco Encalada donde, a la altura del kilómetro 42 de la ruta provincial 82, el agresor atropelló y mató a los dos uniformados. Las víctimas fueron identificadas como el inspector Jorge Carlos Cussi, de la Policía Vial y Daniel Ríos, auxiliar de la Unidad Motorizada de Acción Rápida, quien quedó decapitado.

Las investigaciones preliminares establecen que las cámaras del Ministerio de Seguridad detectaron el vehículo que huía a gran velocidad y se decidió iniciar la persecución por la ruta 82 en dirección al oeste, hacia Cacheuta. Al llegar al destacamento ubicado en Blanco Encalada, donde hay controles policiales, el hombre realizó una maniobra con el freno de mano, que dejó al vehículo en sentido contrario. El auto, entonces, comenzó a circular hacia el este y los dos policías que lo seguían en moto no tuvieron otra alternativa que tirarse a la banquina, ya que el rodado de mayor tamaño venía de frente. EL conductor hizo lo mismo y atropelló a ambos uniformados, que murieron en el acto. Luego de dar algunas vueltas, la Ford Ranger terminó con las ruedas hacia arriba frente a un parador. El conductor fue detenido de inmediato.

“Tengo dos policías, dos policías, a uno le falta la cabeza”, dijo por radio un uniformado al Centro Estratégico de Operaciones (CEO) de la policía provincial al encontrarse con el cuerpo de Daniel Ríos, auxiliar de la Unidad Motorizada de Acción Rápida. En ese audio, el policía confirma que unos de las víctimas perdió su cabeza durante el impacto.

Roberto José Munives, jefe de la Policía, expresó la conmoción que provocó este hecho en la fuerza de seguridad y agregó que “toda la provincia está muy dolida”. “Perdimos dos muy buenos policías. Sinceramente merecen ser honrados como héroes”, concluyó.