Más de seis meses han pasado desde que se estrenase el film StarWars: Los últimos Jedi, entrega de la afamada saga intergaláctica donde personajes femeninos devenían antológicas heroínas, diversificando un universo sci-fi que, hasta entonces, continuaba siendo predominantemente masculino. Amén de aguerridas damiselas como la Generala Leia Organa, Rey o la Vicealmirante Holdo, presentaba la película a mujeres multifacéticas, multigeneracionales, multirraciales, ocupando tanto posiciones de liderazgo como de aprendices, laburando en equipo, aprendiendo los caminos de la Fuerza. Entre ellas, la entrañable Rose Tico: mecánica de naves espaciales, que –con arrojo y coraje– contagiaba su inalterable fe en la rebelión contra la Primera Orden –sucesor del Imperio Galáctico, cohorte de Darth Vader–, convencida de que la causa traería justicia, paz e igualdad al universo todo. En efecto, seis meses han pasado desde que Star Wars presentase al mundo a Rose Tico, interpretada por Kelly Marie Tran, primera actriz asiático-americana en tener rol de peso en la saga. Y durante estos seis meses, ha padecido la muchacha tamaño ciberacoso en redes que los últimos días abandonó la joven su cuenta de Instagram, agotada de ser target de presuntos “fans”, evidentemente racistas y misóginos. 

¿Qué ha detonado la tirria de los viciosos trolls, a juzgar por los agravios que constantemente le dedican? Que sea mujer, claro; descendiente vietnamita y, horror de los horrores: que no posee una belleza estereotipada. Por fortuna, frente a la orquestada campaña de violencia online, ha habido sonada y solidaria réplica: la de numerosísimos warsies que decidieron mostrar su apoyo a la actriz y denostar las expresiones de odio con…   arte. Y emotivas palabras de cariño. Y es que, bajo el viralizado hashtag FanArtForRose, cantidad de ilustradores/as y dibujantes han comenzado a postear en redes bonitillos retratos del mentado personaje, evidenciando que no todo el fandom es tóxico, que muchos están genuinamente agradecidos por la dirección inclusiva que ha tomado La Guerra de las Galaxias. Acaso haciéndose eco de lo que la propia Rose dice en la susodicha cinta: “Así es cómo ganamos: salvando lo que amamos”.  

Por lo demás, a cuento de la controversia, el conductor de tevé Stephen Colbert se hizo eco y lanzó un tráiler “específicamente diseñado para enojar aún más a los nerds misóginos y racistas”. En la película de mentirillas, “Kelly Marie asciende de actriz secundaria a principal; todos los personajes masculinos caen en un pozo negro después de que Rey les corta el falo; Darth Maul es ahora un feminista interseccional y se revela que Chewbacca fue una mujer durante toda la franquicia”. Cierra el inspirado tráiler con lema a tono “Star Wars, Episodio IX. Cierren el pico de una buena vez, odiosos y ridículos hombrecillos”.