El presidente de la Copal, Daniel Funes de Rioja, admitió ayer que “hay una retracción del consumo de alimentos y esto hace que las fábricas estén trabajando como máximo al 60 por ciento de su capacidad instalada”. “Evidentemente el momento es complicado y la visión empresarial es que aspiramos a que esta complejidad sea lo más corta posible”, dijo el titular de la cámara de empresas alimenticias, Daniel Funes de Rioja. El presidente de la Copal, de diálogo fluido con el Gobierno, agregó que “estas tasas de interés son verdaderamente imposibles de afrontar para el sistema productivo en una economía normal. Hay que pagar sueldos, aguinaldos, incrementos salariales, ajustes de tarifas, pero no hay acceso al crédito y las pymes y las economía regionales se mueven sobre la base del acceso al crédito”. Pidió al Gobierno nuevas rebajas tributarias. 

Por otro lado, trabajadores de la empresa de neumáticos Fate se movilizaron ayer al Ministerio de Trabajo ante la política de la firma de impedir el ingreso de personal como método de suspensión forzosa. Según fuentes gremiales, días atrás los trabajadores del sector Radial Camión rechazaron la implementación de nuevos sistemas de control de la producción y los tiempos de descanso. Fate suspendió a un trabajador y ante la reacción de los demás trabajadores decidió suspender a los 140 obreros del sector.