Tras la exposición del titular de la Fundación Conin, Abel Albino, en el Senado, donde repitió falsas premisas científicas en contra del uso de los preservativos al punto de sostener que "el virus del sida atraviesa la porcelana entonces el profiláctico no sirve", los doctores Alberto Kornblihtt y Pedro Cahn emitieron un comunicado para responder a una de "las barbaridades que hemos escuchado", aseguraron que comparar el látex del profiláctico con la porcelana "no es inocente y tiene por objeto generar miedo en la población" y exigieron a los senadores distinguir "entre el rigor y la ignorancia".

El Dr. Albino afirmó que el profiláctico no protege de nada, porque el virus del SIDA atraviesa la porcelana. La elección del material porcelana como contraposición al látex de los preservativos no es inocente y tiene por objeto generar miedo en la población.

En efecto, los virus fueron descubiertos en 1899 como agentes infecciosos que, a diferencia de las bacterias, pasaban de largo por filtros porosos de porcelana no esmaltada. Los poros de esos filtros son lo suficientemente grandes como para que pase el agua, lo que en ella esté disuelto y los virus, pero demasiado pequeños como para que pase una bacteria, un hongo o un protozoario. El latex es impermeable, no tiene poros como la porcelana no esmaltada. A menos que se rompa, el preservativo es seguro.

Además los virus, como el HIV, son parásitos obligados intracelulares. En este sentido, las células infectadas con virus HIV que podrían ser causa de un contagio son tan grandes que no pasan los filtros de porcelana y, por supuesto, tampoco atraviesan el impermeable látex.

Los legisladores deben distinguir entre la ciencia y la pseudociencia, entre el rigor y la ignorancia.