A una semana de que el Tribunal Oral Federal 4 de Capital Federal lo condenara a 5 años y 10 meses de prisión por el caso Ciccone Calcográfica, el ex vicepresidente Amado Boudou reclamó su excarcelación, pero su planteo no prosperó: el Tribunal Oral Federal 4 de la Capital Federal rechazó su solicitud
 

El ex funcionario, detenido inmediatamente en el penal de Ezeiza tras la lectura de la sentencia, argumentó que el fallo no está firme y que por tanto debía seguir en libertad.  “La condena no justifica el encarcelamiento”, remarcó en su escrito y afirmó que “los imputados en este momento son jurídicamente tan inocentes como antes de iniciarse el proceso”.  “Se es inocente hasta que la condena adquiera firmeza", agregó el ex funcionario, acusado de cohecho y de negociaciones incompatibles con la función pública.  

El viernes el mismo tribunal le había denegado ese beneficio a José María Núñez Carmona, amigo y socio de Boudou, condenado en la misma causa a 5 años y 6 meses. Aunque no en forma unánime, en el caso del ex vicepresidente se pronunció en el mismo sentido. Los jueces Pablo Bertuzzi y Guillermo Costabel rechazaron el pedido. Su colega María Gabriela López Iñiguez votó en disidencia.

Boudou siempre negó la imputación y ratificó su postura durante su alegato final. Ante el tribunal, afirmó que "jamás" negoció por él o a través de terceras personas la compra de la ex Ciccone y señaló que durante el juicio se "invirtió la carga de la prueba".

Su detención había sido pedida especialmente por la Unidad de Información Financiera (UIF), el órgano antilavado del Poder Ejecutivo a través del cual el Gobierno de Cambiemos pone un pie en numerosas causas contra ex funcionarios del kirchnerismo, como también lo hace la Oficina Anticorrupción.