En el comienzo del año pasado, Rosario/12 recabó la palabra del flamante director ejecutivo del Instituto Nacional del Teatro, Marcelo Allasino, quien asumió en el marco de una de las crisis más graves por las que atravesó la institución, producto de antiguas luchas internas.

Apenas comenzado el año, se impone un balance sobre lo actuado y los logros obtenidos por esta nueva gestión, sospechada de funcional al gobierno macrista y resistida por una gran cantidad de teatreros.

"En diciembre de 2015 el INT se encontraba en una situación de emergencia; el conflicto desatado desde hacía varios meses, por una puja interna de intereses y competencias entre la Dirección Ejecutiva y un Consejo de Dirección fragmentado, había sumido al organismo en una parálisis total, y a la comunidad teatral en una situación de desamparo", dijo Allasino a Rosario/12.

En medio de este caos que llegó a preanunciar la intervención de la institución, el nuevo director y su equipo tuvieron que hacerse cargo de una situación que según su criterio "requería transformaciones urgentes y profundas".

-¿Cómo se resolvió la cuestión de los expedientes paralizados?, preguntó este diario.

-La emergencia administrativa frente a la ejecución presupuestaria de aquel año, con 500 expedientes a la espera de mi firma, me dejó una tendinitis en la muñeca derecha, que aún hoy se manifiesta cada vez que firmo una resolución. Más allá de nuestro esfuerzo y voluntad, no logramos ejecutar todo: más de 15 millones debieron retornar al Tesoro Nacional porque un puñado de ONGs y personas decidieron accionar legalmente en contra del organismo, trabando el pago de numerosos planes que el INT gestionaba 'bajando fondos' a través de las mismas ONGs".

En un hecho inédito tanto el director del INT como el representante del Ministerio de Cultura de la Nación en el Consejo de Dirección, Federico Irazábal, deciden encarar el Plan Federal de Contacto, viajando a trece provincias del país. "La idea -dijo Allasino- era reunirnos cara a cara con los protagonistas de las comunidades teatrales de cada una de las regiones argentinas; la primera de esas reuniones aconteció en Rosario, y tuvo una alta participación de artistas, técnicos y pensadores del teatro", señaló.

-¿Cual fue el panorama que encontraron y qué medidas se adoptaron para lograr recomponer la crisis?

-Los primeros meses estuvieron dedicados a sanear una administración viciada por la ausencia de controles y por la ineficiencia; el reordenamiento administrativo exigió decisiones, algunas incómodas pero necesarias; nuestros ejes de acción fueron el diálogo, la transparencia, la eficiencia y la innovación.

Entre algunas anomalías, la nueva gestión se encontró con la adquisición de equipamientos lumínicos y sonoros que habían sido comprados para salas que todavía no estaban construidas. "Los redistribuimos a través de un proyecto que presenté al Consejo de Dirección: la reasignación de los equipamientos de los Teatros de la Independencia; uno de ellos está siendo instalado en estos días en la Escuela de Artes Urbanas de la Municipalidad de Rosario", comentó Allasino.

Entre las múltiples tareas que encaró la nueva gestión del INT, se encuentra el reordenamiento de la Dirección de Fiscalización, la conformación del Area de Rendición de Cuentas, poniendo en vigencia un nuevo Reglamento de Inhabilitaciones. Según el director ejecutivo del INT, "de esta manera se formalizó, mejoró y transparentó una metodología de trabajo que venía operando hacía años, y que tras varios intentos de gestiones anteriores no se había podido formalizar".

Otra de las preocupaciones de Allasino fue el tema de la capacitación, desarrollando una tarea que abarcó al personal, a los consejeros, a los aspirantes a cargos y a todos los asistentes técnicos provinciales, excepto a los de la Provincia de Santa Fe, que según el director no pudieron asistir.

Allasino destacó dos grandes logros de su gestión: la Fiesta Nacional del Teatro en Tucumán y el Circuito Teatral INT 2016, ambos realizados mediante la acción directa del organismo y sin la cuestionada intermediación de ONGs. "Estos logros de la gestión fueron y sentaron las bases para que hoy las fiestas provinciales y los encuentros regionales puedan efectivizarse con esfuerzos, recursos y compromiso de los agentes del Estado Nacional", dijo.

"En nuestra región rendimos homenaje a una gran artista rosarina, a la que tuve el privilegio de dirigir hace unos años: Cristina Prates", comentó, refiriéndose a In Corpore Sano, obra en la que Allasino fue convocado por el histórico grupo de danza‑teatro local Seisenpunto.