Analba Brazão Teixeira milita hace 25 años en la Articulación de Mujeres Brasileras. Si bien quería participar de un Encuentro Nacional de Mujeres en Argentina desde hace tiempo, tras la elección presidencial de su país dudó si distraer esos días necesarios para activar el boca a boca en su país a favor de Fernando Haddad y contra el candidato que obtuvo mayor cantidad de votos, Jair Bolsonaro, al que ella no nombra. Lo llama “el coso”. Analba sueña con llevarse de Trelew un #EleNao multitudinario. Si bien saben que es hora de apostar por la positiva, cree que el feminismo no debe renunciar a la consigna que tomó las calles y las redes sociales. Ese hashtag que saltó desde los espacios virtuales a una movilización de millones en más de 400 ciudades de Brasil, con acciones simultáneas en 30 países del mundo, es hoy una promesa de futuro. “La lucha nuestra contra el fascismo va a permanecer después de las elecciones,  aunque ‘el coso’ no gane, y creemos que no va a ganar. Vamos a poner toda nuestra fuerza, toda nuestra militancia para revertir este cuadro atemorizante. Es muy importante que todos los movimientos feministas, el feminismo internacionalista, se apropien de esta lucha, porque este tema atañe a toda la región. Es mucho más que el conservadurismo, es el crecimiento del fascismo”, alerta Analba en una entrevista vía Whatsapp, muy cansada, entre el trajín electoral y el viaje a la Argentina. 

El 20 de octubre habrá una nueva movilización de las mujeres contra el candidato que predica la misoginia, entre otras violencias. Analba sabe que tienen que hacer campaña para difundir las propuestas de Haddad, pero no quiere dejar la huella que los feminismos brasileños ya instalaron. “No podemos perder el hashtag Ele Nao, como la palabra del movimiento feminista, con ella mostramos nuestra fuerza y la vamos a continuar mostrando, la fuerza del feminismo antifascista”, asegura.

Admite que la gran diferencia obtenida por Bolsonaro las sorprendió, y que además de todos los riesgos que supone, trae aparejado el crecimiento de sus partidarios en los parlamentos y los gobiernos estaduales (provinciales). Subraya el gran apoyo de las iglesias fundamentalistas al ex militar, el candidato que siendo diputado federal elogió al torturador de Dilma Rousseff durante la sesión que terminó con el impeachment de la presidenta legítima. “Las iglesias fundamentalistas, pentecostales, invirtieron mucho la última semana, también hubo muchas falsas noticias, ellos tienen un grupo inmenso para hacerlas y después es difícil difundir las desmentidas. Hicieron algo muy grande con eso”, dice. Bolsonaro recibió el apoyo explícito de Edir Macedo, fundador de la Iglesia Universal del Reino de Dios, la del “Pare de Sufrir”, que es un imperio religioso y económico. Es la propietaria de la segunda cadena de televisión de Brasil, Récord. 

Por todo eso, Analba rechaza de plano los análisis que atribuyen a la movilización feminista el crecimiento del candidato de ultraderecha. “Estamos completamente en desacuerdo, porque la campaña EleNao fue súper importante para mostrar que las propuestas del ‘coso’ son una amenaza para la sociedad, fue la fuerza del movimiento feminista que desenmascaró  sus propuestas fascistas, racistas, homofóbicas, y en este contexto, el feminismo creció tanto en las redes sociales como en las calles”, subrayó Analba, con el foco puesto en la potencia del movimiento. “Conseguimos que se eligieran muchas candidatas feministas, negras, de las periferias. Fue muy positiva esa movilización del día 29. En forma alguna fue nuestra movilización lo que hizo que ‘el coso’ llegara primero”. Pone como ejemplo no sólo la elección de una amiga y tres asesoras de Marielle Franco -la concejala asesinada en marzo pasado- en Río de Janeiro, sino también la experiencia Juntas, de Recife, donde un grupo de cinco mujeres -entre ellas una joven trans-, asume una banca de manera colectiva. 

La internacionalización del feminismo es uno de los datos que Analba subraya en esta época. “Es muy importante que tengamos la información compartida de lo qué está pasando en Brasil, en Honduras, en Guatemala, en Argentina, entonces tenemos la posibilidad de apoyar. Esa es la gran novedad el movimiento feminista, que a partir del 8 de marzo de 2017, y más profundamente, desde el 8 de marzo de 2018, pudimos fortalecer una internacional con más de 40 países y compartimos lo que está pasando en nuestros países. Tuvimos y tenemos mucho apoyo en relación al reclamo de justicia por Marielle Franco, también con la lucha por la legalización del aborto que fue desencadenada en Argentina y también en Brasil, con la diseminación de nuestra lucha por la democracia, porque luchar por Lula Libre es luchar por la democracia”, dice Analba sobre el valor de las articulaciones. Y advierte que “el coso” tiene como primer objetivo destruir a los movimientos sociales, y por eso el feminismo necesita impedir que llegue al poder. 

En Trelew participará por un lado de las reuniones del Foro Feminista contra el G20. “Todo ese proceso del 8 de marzo desencadenó varios colectivos como el Foro Feminista contra el G20. Estamos organizándonos para hacer grandes acciones en diciembre, porque el G20 es el que va a profundizar cada vez más las desigualdades, y tiene todo que ver con lo que está pasando en Brasil”, dice Analba. La cumbre de los presidentes de  los 20 países más poderosos del planeta se realizará el 30 de noviembre y el 1º de diciembre en Argentina. Analba también participará en las actividades de Feministas de Abya Yala, donde se referirá a la criminalización de los movimientos sociales y muy especialmente al pedido de justicia por el asesinato de Marielle Franco.  

Y aunque sabe que la urgencia es militar en cada calle, cada barrio y cada pueblo de su país, Analba apuesta a tejer redes con las mujeres de toda la región, porque cree que el feminismo sobrepasa cualquier frontera. “La movilización del 29 de septiembre fue histórica, un día en que el movimiento feminista brasileño consiguió poner en las calles de más de 400 ciudades brasileñas a millares de personas y la convocatoria fue del movimiento feminista. En el segundo turno el desafío es inmenso, muy grande, pero nosotras estamos confiadas, vamos a continuar actuando en las redes, con la campaña Ele Nao, vamos a conversar con las personas, voto a voto en las comunidades, los barrios, los ómnibus y vamos a convencer personalmente a la gente”, afirma Analba. 

En un momento definitorio, Analba decidió llegar hasta Trelew desde el Nordeste brasileño, una región donde Haddad fue el triunfador de la elección. “El Encuentro va a ser muy importante porque voy a energizarme, a tomar buenas energías de las mujeres indígenas de ahí, de todas las mujeres. Voy a tomar toda esa energía para fortalecerme en la lucha, porque en este momento es muy necesario estar juntas, es muy bueno que estos encuentros nos fortalezcan, va a ser muy bueno contar cómo está la situación en Brasil, ampliar el apoyo, quién sabe hacer una acción allá, con todas las mujeres gritando Ele Nao, Ele Nao, Ele Nao. Quién sabe si conseguimos hacerlo con todas las mujeres presentes en ese Encuentro”, se entusiasma.