¿Qué hace falta para cruzar límites y quedar del otro lado de la corriente? En los cinco relatos que componen la antología psicológica Frágil, compilada por Agustín Condomí Alcorta, sus protagonistas se hacen dueños de las respuestas, transportan al lector al interior de sus mentes y les dejan ver qué hay en la otra orilla; les permiten ponerse en sus pieles y sentir la fragilidad de sus mundos. 

El lector puede vivir las experiencias que los transformaron y los hicieron frágiles ante el universo de los demás.

Los textos pertenecen a Vicente Armendáriz, Inés Loureyro, Pablo Minoia, Pilar Neira y Julieta Otálora. 

“Vivimos en un mundo que nos brinda poco más que productos para consumir y descartar, y que nos pide a cambio nuestro tiempo, el dinero que ganamos con nuestro trabajo. Y, más importante: nuestra salud física y mental –dice Condomí Alcorta en el prólogo del libro que publicó la editorial textosintrusos–. Quienes pueden, se acoplan al ritmo del mundo y resuelven sus problemas de mejor o pero manera, con sus propias capacidades de tolerancia y con las herramientas incorporadas a lo largo de la vida. Para algunos, como los personajes que componen este libro, están muy lejos de manejar esas herramientas, y no se ajustan a las normas impuestas por la sociedad. Una sociedad que tiende a sacarse de encima a quienes son diferentes, a los que muestran sus propios fantasmas, a quienes tienen dificultades para desentrañar una realidad que muchas veces les es ajena”.