En un contexto de crisis económica general y suspensiones y reducción de plantilla en las empresas, las terminales automotrices decidieron no llevar adelante la realización del Salón del Automóvil, la muestra que se realiza cada dos años en La Rural. El derrumbe de las ventas internas del 34,7 por ciento en septiembre y del 2,2 por ciento en nueve meses frente al mismo período de 2017 encendió alarmas en el sector. Varias empresas terminales evaluaron que no era el momento de realizar las erogaciones que exige la organización del evento. Ante la posibilidad de que empresas líderes no participen, el conjunto del sector se bajó del evento bianual, que estaba previsto para junio del año próximo. Según el último dato disponible, la producción de vehículos cayó en septiembre un 24,5 por ciento.