A partir del martes 20 de este mes, el pasaje en subte aumentará nuevamente un peso, como en meses anteriores, y así pasará a costar 13,50 pesos. Al mismo tiempo, el viaje en Premetro costará 4,50 pesos. Así lo informó Sbase, la empresa que administra el servicio, que depende del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. 

 El plan de ajuste oficial de los pasaje consiste en el aumento de un peso por mes hasta llegar a los 16,50 en febrero de 2019, cuando el Premetro, subiendo de a 50 centavos, costará 6 pesos.“Esta actualización responde a múltiples factores como la variación de la tarifa técnica –que refleja el costo de la explotación del servicio– y la necesidad de equiparar los valores de los diferentes medios de transporte”, manifestó Sbase.

 El primer aumento del año se aplicó a partir del 3 de agosto, cuando se dispuso un incremento del 67 por ciento. Este aumento estuvo demorado varios meses, debido a un amparo judicial que, finalmente, fue resuelto a favor de las autoridades oficiales y en beneficio de Metrovías. A lo largo de 2018, el valor del pasaje se habrá prácticamente duplicado, ya que a comienzos de año estaba en 7,50 pesos y llegará, de acuerdo al cronograma vigente, a un precio de 14,50 pesos para el mes de diciembre. 

 En otro orden, y en virtud exclusivamente de un problema administrativo del Gobierno de la Ciudad, el contrato que vincula a Metrovías con la sociedad estatal Sbase, que vencía el 31 de diciembre próximo, fue prorrogado hasta el año 2020. El jueves de la semana pasada, el jefe de gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, remitió un proyecto de ley a la Legislatura para modificar la cláusula transitoria primera de la ley que aprobó el llamado a concurso para la red subterránea, ya que las demoras en el concurso hacían imposible tener al adjudicatario para esa fecha. La comisión encargada de analizar las ofertas técnicas demandó 45 días hábiles más para analizar las propuestas presentadas, plazo que recién se cumpliría a mediados de enero de 2019. La etapa posterior, de evaluación del plan económico de cada uno de los concursantes, demandaría no menos de 30 días más. 

 El nuevo operador, en el mejor de los casos, recién podría estar en condiciones de hacerse cargo hacia fines del primer semestre. Según las autoridades del gobierno porteño, “a los fines de garantizar una transición ordenada”, se dispuso modificar la fecha de finalización de la actual concesión, lo cual no significa, aclararon, una prórroga por un año del contrato.