"Luis Carzoglio fue separado por no meter preso a Pablo Moyano”, puntualizó el abogado Diego Raidán en referencia a su defendido, el juez que fue suspendido de su cargo durante 90 días tras denunciar la existencia “carpetazos” entre la Procuración General bonaerense y algunos medios de comunicación, así como también “presiones” de parte del gobierno nacional a través de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI). El letrado afirmó que “no tiene dudas” que la causa por la que su cliente será sometido a un jury está “armada” y denunció “la manipulación política” del Consejo de la Magistratura.

Carzoglio es el juez que desestimó un pedido de detención planteado por el fiscal Sebastián Scalera contra el secretario adjunto del gremio de Camioneros, uno de los dirigentes que está en la mira de la administración de Mauricio Macri. Luego de hacerlo, denunció presiones de los gobiernos nacional y provincial. En noviembre pasado fue suspendido para ser enjuiciado.

Al respecto, Raidán aseguró “no tener dudas de que se arman causas”. “Lo estoy viendo y viviendo como abogado defensor”, dijo e insistió con que “parece que el único disparador fue negarse a detener a Pablo Moyano por los fundamentos que consideró, el enojo por parte de quienes lo pedían y la utilización o manipulación por parte de los políticos haciendo abuso del encendido del Consejo de la Magistratura para poner en movimiento causas de antigua data”.

En este sentido consideró que la suspensión del magistrado es parte de una maniobra que pretende revertir la decisión por la que fue cuestionado: “Lo corren y ponen otro para que pueda resolver y después ven que hacen con él”, dijo en dialogo con FM La Patriada.

Raidán también vinculó al apartamiento de Carzoglio con la denuncia que hizo el propio magistrado cuando reveló haber recibido “visitas de la AFI” para comunicarle que “el presidente Mauricio Macri estaba interesado” en la causa contra Moyano. El abogado calificó a ese hecho como parte de “las presiones que recibió el juez”, así como también parte de “una serie de sucesos para saber cual era el pensamiento de Carzoglio y preparar el camino del enjuiciamiento”.

De la misma manera, cuestionó al procurador bonaerense, Julio Conte Grand, por tener “un modus operandi” común para los casos en que él está interesado: “Primero hay una embestida mediática, luego una embestida por parte del Poder Judicial y finalmente hay pedido de detención”, concluyó.