Domingo Cavallo realizó una serie de recomendaciones a Mauricio Macri. Según el ex ministro de Economía de Menem y De la Rúa, el oficialismo no puede repetir la estrategia de las últimas elecciones, basadas en negar las acusaciones de ajuste y privatización que realizará la oposición. El desgaste de 3 años de promesas incumplidas con una economía en claro declive, tornan insuficientes las estrategias de marketing político de Durán Barba. La “única forma de evitar” una mayor fuga de capitales y alza del riesgo país que termine en una crisis similar a la que se llevó puesto su Plan de Convertibilidad, es comunicar a los mercados un “plan realista y sincero” para 2020-2023. 

El programa económico de Cavallo propone reducir el tamaño del Estado y del sistema público de jubilaciones, flexibilizar el mercado de trabajo, eliminar retenciones y abrir las importaciones, establecer legislación favorable a grandes empresas en el sector energético y dar una orientación clara de la futura política monetaria. Al respecto, los lineamientos generales de la propuesta de Cavallo, no difieren mayormente de los que intentó implementar en tiempos de De la Rúa para evitar el derrumbe de la convertibilidad. El hecho de que dicho programa haya terminado en una de las peores crisis de la historia argentina no parecen haber logrado que el autor del megacanje repiense las estrategias de la política económica. Lamentablemente, las posibles consecuencias de sus recomendaciones no difieren de las que se llevaron puestos los ahorros de millones de argentinos años atrás. 

El achicamiento del gasto público y del sistema público de jubilaciones para reducir impuestos en un contexto donde el consumo y la inversión privada están en franca caída sólo acentuará la recesión económica y las chances políticas del oficialismo. La mayor debilidad política del oficialismo seguramente acentuará la fuga de capitales y el alza del riesgo país, dado el perfil insustentable de deuda dejado a su sucesor y la expectativa de que la hoy oposición realice una reestructuración de deuda más firme que la que podría implementar Mauricio Macri. Mientras, la propuesta de flexibilización laboral incrementará el conflicto con las centrales sindicales, mermando aún más las chances electorales del oficialismo y dando mayores señales a los mercados de ingobernabilidad.

La apertura importadora en una economía que necesita dólares y reactivar su aparato productivo carece de cualquier explicación lógica, mucho menos en un contexto global de creciente proteccionismo. La reducción de las retenciones torna inviable el programa fiscal y su resultado en materia de divisas, ya que incrementará el excedente dolarizable del sector primario exportador. El intento de resolver el sobreendeudamiento con los dólares que pueda traer las inversiones en Vaca Muerta sólo será posible con una legislación que evite que los saldos exportables del sector se fuguen al exterior. Para ello, la legislación debe ir por el camino contrario al pensado por Cavallo y la YPF estatal debe jugar un rol central

@AndresAsiain