Damián Carracedo fue agredido el domingo pasado en el balneario de San Cayetano, próximo a Necochea, gobernado por el intendente macrista Miguel Gargaglione. El hecho ocurrió en la puerta de un boliche, cuando Carracedo, de 32 años, fue interceptado junto con dos amigos y la novia de uno de ellos por agentes de la Policía Bonaerense que no se identificaron y les pidieron documentos. A pesar de que los interpelados entregaron sus DNI, los jóvenes fueron agredidos por los uniformados y se refugiaron en el boliche.
Cuando finalmente los mismos jóvenes decidieron abandonar el lugar, los bonaerenses "provocaron y corrieron” a Carracedo, según contó a este diario Rocío Dubrovsky, la novia del agredido. “Se entregó y le siguieron pegando, nunca le dieron la voz de alto”, agregó Rocío. La víctima fue golpeada al menos tres policías y trasladado a la comisaría. En ningún momento le prestaron auxilio, pese a los golpes y a que el joven manifestaba sentir dolor en la cara. De hecho, hubo una primera revisación en el hospital de la zona, donde no le tomaron placas.
“Nunca lo revisaron y lo tuvieron esposado”, agregó la pareja de Carracedo. Recién a las dos de la tarde del lunes, ante un nuevo pedido de ayuda, lo trasladaron nuevamente al hospital. Allí se comprobó que tenía el maxilar fracturado. Quedó en libertad, luego de haber estado doce horas detenido, acusado de resistencia a la autoridad. Su familia nunca había sido notificada de la detención.
Tras quedar en libertad, Carracedo y su familia, patrocinados por la Coordinara contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), hicieron la denuncia en la Fiscalía 3 de Necochea, a cargo de Guillermo Sabatini. Los oficiales de San Cayetano involucrados en la agresión están identificados porque revistan en la comisaría de esa localidad, no así los agentes asignados al Operativo Sol “que están en otros destacamentos”, apuntó Dubrovsky.
La denuncia de la familia Carracedo alcanza no solo a la policía sino también el director del hospital, Ricardo González, quien negó el traslado a un centro de mayor complejidad para comprobar si Damián había sufrido algún daño cerebral.
“En un país en el que las fuerzas represivas matan a un pibe por día mediante la ya conocida práctica del gatillo fácil, San Cayetano no es una excepción a esta situación”, denunció la Correpi en un comunicado. “El pueblo que (el oficialismo) busca mantener prolijo y en orden, en el que la alianza Cambiemos ganó con el 75 por ciento de los votos, es cuna de sistemáticos hechos de violencia hacia nuestrxs jóvenes”, advirtió la Correpi.